icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Su Profecía, el Espíritu Destrozado de Ella

Capítulo 9 

Palabras:895    |    Actualizado en: Hoy, a las 14:31

ke

i espíritu inquieto. Pero hoy, no ofrecía consuelo. Mi mente seguía divagando, reproduciendo el rostro furioso de Am

stá fragmentado. La energía a tu alrededor está perturbada. -Señaló mi teléfono, que había estado aga

te en busca de respuestas de Amelia. Pero no había ninguna. Mi último mensaje, una notificación escueta de su alta y mi «bendición»

ré, inclinando la cabeza-.

camino rara vez es fácil, hijo mío. El universo nos pone a p

cansada, pero radiante. Ella era la indicada. La destinada. La madre de mis herederos. Entonces, ¿por qué sentía esta persis

voz suave, preocupada-. ¿Está

as. -Solo contemplando la sabiduría del Maestro, querida. El camino

ia era un problema, una fuente de energía negativa, ahora afortunadamente eliminada a través de una limpieza necesaria (aunque quizás

mara. Ximena pareció nerviosa, tratando de callarlo, pero sus llantos solo se hicieron m

ron lentamente. Miré su rostro, tan inocente, tan pequeño. Era un Garza, mi hijo. Sin embargo, un pensamiento extraño, no invitado e inoportuno, se deslizó

pensamiento. ¿Qué estaba pensando? Es

ijo que podría llevarse algunas de tus pertenencias personales. Cosas preciosas. Por despecho, supongo. Acabo de recordarlo. Espero que

se iría de verdad. No Amelia. Estaba agradecida, dependiente. Me amaba. Simplemente estaba desquitándose porque no podía aceptar la vo

Inmediatamente llamé al administrador de mi finca-. No permitan que Amelia entre en l

, la guiaría suavemente de regreso a su lugar, y quizás, eventualmente, incluso se le podría permitir ense

buscando bendiciones. Incluso le pedí al Maestro que consagrara un amuleto especial, un pequeño e intrincado relicario, para Amelia. Una muestra de perdón, una invitación silenciosa

ndo. Incluso estaba preparado para pasar por alto su arrebato violento. Después de todo

eléfono, esperando una ráfaga de mensajes desesperados, quizás incluso un mensaje de voz lloroso.

entino e inexplicable apoderándose de mí.

Obtenga su bonus en la App

Abrir