Enmascarado Amor

Enmascarado Amor

Matteo Lombardi

Mi apellido, pertenece a una de las familias, más tradicionales de Verona Italia, desde hace generaciones se, han concretado matrimonios comerciales, entre los apellidos más importantes, con el único fin de procrear herederos dignos de sus imperios, mis padres Annette y Lorenzo Lombardi, cumplieron con este deber hace muchos años, frente a la sociedad, eran un matrimonio sumamente amoroso, cualquiera que los viera pensarían que, estaban perdidamente enamorados, pero cuando estaban en la privacidad de su hogar, la realidad era otra. Entre ellos, no había nada parecido al amor, solo eran dos jóvenes que fueron obligados a casarse.

En mi familia era, costumbre que el primogénito, se enseñara desde casa con la intensión, de que fuera preparado para, en un futuro ser el sucesor de su padre, en dirigir los negocios de la familia. El Heredero debía aprender diferentes idiomas, tocar el piano, artes marciales, natación, aprender esgrima. En pocas palabras, debía aprender todo lo necesario, para en un futuro no muy lejano, demostrar que soy una persona capacitada, para estar a cargo de la empresa familiar.

Mis padres siempre, participaban en diferentes eventos sociales, con el fin de da,r a demostrar que éramos una de las familias más ricas de Verona, por eso que cada vez que, había algún evento benéfico debía asistir, ya que era mi obligación hacerlo, como el hijo mayor de Lorenzo Lombardi, no tenía ninguna oportunidad de negarme, como si la tenían mis hermanos menores, que siempre que se negaban a ir, quedaban al cuidado de nuestras niñeras.

Por imposición de mis padres, estudié negocios internacionales en Londres, no era lo que deseaba estudiar, pero tuve que aceptarlo, como cada cosa que, se me fue impuesta a lo largo de mi vida, a pesar de no estar muy de acuerdo con mi carrera, debo dejar el apellido Lombardi, en lo más alto ya que eso me asegura tener, buenas relaciones con otras empresas. En la universidad donde estudio, es conocida porque todas las familias importantes, de la elite italiana mandan a sus hijos a estudiar aquí, si quieres ser reconocido por tu poder adquisitivo, debes tener un título de esta unidad educativa.

Apenas me gradué de la universidad, quede a cargo de la compañía familiar, desempeñando el puesto de CEO de Company Lombardi, soy conocido en el mundo de los negocios,, como el "Tiburón" gracias a mi audacia e inteligencia, para conseguir buenos acuerdos comerciales, si deseas llevar a tu compañía, a hacer la mejor de toda Italia, debes tener presente que muchos, querrán verte destruido y es allí, donde debes tener, a tus rivales bajo tus pies, que no se olviden quién eres, y de lo que eres capaz de hacer para lograr lo que deseas.

Mi Padre, me preparo para hacer, pagar aquellos que quieran, pasarse de listo conmigo, por tal motivo antes, de hacer cualquier asociación, investigo a mi posible socio, si hay algo sucio o turbio, lo uso para sacar provecho, y tener una buena ventaja en contra mí, soy un Lombardi, debo ser superior a todos.

Debo demostrar que nadie puede jugar conmigo ni pasar por encima de mí.

Hace algunos años, en una fiesta de negocios conocí, a una hermosa mujer llamada, Fiorella Moretti con quien tiempo después, inicié una relación de amigos con beneficio, se hizo mucho más fácil, de llevar porque nuestras familias son socios en diferentes negocios.

Mi padre hizo un matrimonio comercial. entre Lombardi y Moretti, para que nuestras empresas se unifiquen, y sean más poderosas de lo que son, por mi parte era, lo que menos deseaba un matrimonio impuesto, con el fin de hacer más ricos a nuestros apellidos.

Aunque estoy comprometido con Fiorella, y aunque el sexo con ella, es muy bueno, no dejo de acostarme con otras mujeres, no dejaré de ser un mujeriego, porque es lo que esperan de mí, esperan que sea un correcto hombre de negocio, un hombre de familia, un hombre que ame profundamente a su esposa.

Pero, ¿cómo hacerlo? si nunca, me dieron ese ejemplo.

Lo que si, me dieron de ejemplo fue aparentar, ser un hombre perfecto, frente a la Elite italiana, aunque la realidad es otra, soy un hombre que no, desea casarse y estar amarrado a una sola mujer, pero es lo que esperan de mí, para eso fui entrenado durante años, para controlar mis emociones ,y olvidarme de lo que yo deseo hacer con mi vida.