Sofía Vargas, una arquitecta, ha pasado cinco años como la amante secreta de Mateo, amándolo con la esperanza de un futuro, mientras él la ha tratado con una exasperante indiferencia.
Una noche, su mundo se desmorona al escuchar a Mateo confesar a sus amigos que ella es solo su "práctica", su "coche de autoescuela", para un día conducir su verdadero "Ferrari": Isa.
La humillación de ser un mero objeto la impulsa a aceptar un matrimonio de conveniencia con su amigo de la infancia, Javier, y a purgar cada rastro de Mateo de su vida.
Pero la ceguera de Mateo persiste: incluso cuando Sofía cae gravemente enferma, él continúa priorizando a la manipuladora Isa, abandonándola en el hospital por un rasguño de la "princesa".