De Ahogada a Amada: Una Segunda Oportunidad
abrió la puerta principal. Entró Alejandro
ó, sorprendido de verme-.
elacionó mi salida temprana con el bienestar de Kenia, c
ás problemas? Te dije qu
i pierna estuviera rígida como una tabla o que mi estómago se sintiera como si estuviera lleno de vidrios rotos.
preguntado.
padres -dije, cambiando de tema.
osas a las que todavía le prestaba atención de dientes para
is padres, dejaré pasar la disculpa por
abía lo q
ide mientras se recupera. E
e miró mientr
principal. Tú puedes dormir
arrendamiento. Pero estaba siendo degradada a una invitada en mi pr
palabra salió sin esf
placido por
endo. Recuerda, Eva, en nues
despectivo h
enia le gusta tu estofado. Haz
a cocina. Es solo una comida
s. Cocinar para su amante una últi
r recorrió mi cuerpo. El clima ni siquiera era frío, pero mi sistema todavía estaba en shock
ra tomar la tetera eléctrica y he
í de la cocina, apoyándome en el m
de agua caliente? -pregunté. Mi vo
ba atendiendo a Kenia, con el
a, Eva. Solo prepara la c
fuerte que saboreé l
que yo también sea una
ra que no lo pensara. Era que
nera logré preparar una comida completa, mi cu
estaba ligeramente entreabierta. Vi a Alejandro sosteniendo
ero. Puso una exp
Pero no debiste haberme empujado sol
a que él sostenía. Era un líquido oscuro
de hierbas
s personas con "frío interno" crónico, como yo. Mis compañeros de escuadrón se habían esforzado mucho para conse
e té? -pregunté, mi v
respondió
uando vinieron de visita. S
furia calien
-. ¡Fue un regalo de mi escuadrón, por mi
e convirtió
s solo té. Kenia está débil a
conseguir esa pequeña y preciosa lata parpadeó en mi mente. La idea de q
ión en mi rostro y la s
. Piensa en los demás antes que en ti. -Usó los mismos
idad, intervino con una
o, Eva. N
blancos. Mi voz temblaba con un
? El frío la empeora. Yo
retorcido me atravesó el abdomen. Instin
Me había lanzado frente a Alejandro, recibiendo la peor parte de la onda expansiva. Fue la razón p
esión de dolor no con
jo, su voz goteando desprecio-. N
lar. No ten
ente. Mis necesidades eran secundarias
Kenia salió tambaleándose de la recámara, quejándose de que se sen