De Ahogada a Amada: Una Segunda Oportunidad
para hacer pedazos mi solicitud
staba a mi lado, con una máscara de fastidio en el rostro. Me ordenó que le pidiera
do, directo hacia Kenia, que fingía ahogarse. Él se creyó sus mentiras, acu
r que ya lo había traicionado antes. Incluso usó mis propios valores e
ahogamiento había sido un bautizo. Por fin lo ente
que usaba para mi dolor crónico. Luego me degradó a ser una invitada en mi propi
ítu
l. El aire olía a pape
ud de matrimonio -le
peles, sus ojos se abriero
a? ¿Tú y Alejan
Solo necesitamos actualizar una
o era meticuloso. Un error en un
cía a mi familia desde hacía años, seguía pareciendo preocupado. Sacó
la voz-. ¿Está tod
uspendido en el a
je, una verdad que se sentía como vene
steza y comprensión en sus ojos. Era la misma mirada que
está bien, Eva. Tú eres su prometida. Si quiere
padre de Alejandro. Una sonrisa
Robles. Pero no
rta se cerró detrás de mí, caminé hacia el bote de basura más cercano. Hice pedazos l
bía a
.
rtado con el olor agudo
dro estaba sentado en una silla a mi lado, con los brazos cruz
a. Un destello de fastidio cruzó sus
e -dijo. No er
rofundo estalló en mi abdomen, un cruel recordatorio de la explosión en un o
voz de Alejandro era cortante, impacient
ni
el recuerdo de lo que pasó antes
le. Kenia se había acercado por detrás, con una sonrisa de suficiencia en el
ento. Mi pierna, la que tenía la varillaleada de esperanza. Luego pasó nadando justo a mi lado, hacia Kenia, que chapoteab
viera negro fue a Kenia, a salvo en la or
ra, mi voz más fría
parme? ¿
culpidas se juntaron en un
va. Pudo haber muerto. No
e mis labios. Fue un
é? ¿Esa es la his
só de la impaciencia a una r
celosa de ella desde el principio. Me viste habl
tan retorcida, que todo lo que
marga se form
dado. ¿Cómo podría competir con las br
. Solo era un accesorio, una mujer atractiva y estable que podía presumir.
sobre ella. Sobre la forma en que me miraba
e yo era paranoica. Que era ins
. Tan increíbl
tizo. En esos momentos oscuros y helados, por fin lo entendí. No podía arreglar es
en la habitación, co
a Ferrer ya despertó. Es
ó con la de Alejandr
Te ne
e mi fácil sumisión, rápidamente reemplazad
Cuando vuelva, espero que
f
vol
un dolor agudo y punzante. No esperé más. Me desconecté el suero yo mi
ar por la habitación 204, oí la voz de Alejandro.
sentado a su lado, pelándole una manzana con cuidado, su ex
stro grabado de preocupación. Observé cómo el
n perfecta y
estar fuera
ró, luego miró la escena en la habitación, y sus
por el frío y el shock -dijo, su voz
enia en
omo o
a ocultar s
. No necesita estar aquí pa
ergüenza. Alejandro se levantó de inmediato y se dirigió a la pue
observación -declaró, s
rmera, negándose a ceder-. E
clara amenaza-. Mi familia es una de las principales donantes de
. Me lanzó una mirada de compasión, lue
ado por la justicia, usando su poder e influencia para proteg
la cabeza y emp
spera -
ero no me d
ebes una disc
vacía de toda emoc
pie en el pasillo. Ignoré el consejo del médico e
Registro Civil. Era hora