LA REBELDE PRISIONERA DEL CRUEL ALFA
vanté de inmediato y miré a los hombres allí presentes; todos eran tan desagradabl
e embrujarme! - g
pero alguien volvió a poner su espada en mi cuello. ¿Acaso est
rto el cuello - me
e lobo color blanco. El tipo que me estaba ap
n esa cosa, o nos va a matar -
inando, definitivamente estaba en coma por la caída y mi cerebro estaba construyendo una realidad alterna. Nada de esto podía ser verdad.
es la que estábamos esperando - d
ntendí que ellos creían que era una bruja por ese estúpido amuleto. Esa anciana me la
do, estoy aquí por culpa de ese amuleto, así que por favor déjeme libre,
peligroso, su cabello largo y rubio caía por sus muy formados brazos. mi mirada se f
abozo -
r que yo no me podía quedar aquí, ¡necesitaba qu
aquí, por favor te lo ruego, yo quiero volv
a mí, me tiró sobre su hom
go que volver, por favor
peor. Él siguió caminando hasta un lugar oscuro y frío, me lanzó dentro de lo q
on todas mis fuerzas, pero el h
merán poco a poc
provenía la voz, y allí, casi en los hueso
os pies del hombre atado frente a mí. la puerta se abrió y entró el tipo peligroso yo
sé que me iba a quedar aquí par
al vikingo, me lancé sobre él y
- le dije
y ni hablar de lo aterrador que era. Yo
- me ordenó con
era necesario viviría sobre él, pero yo no iba a poner un
iato y lo quedé mirando, apuñalé su muy dur
aques de aquí! - le g
yo no sobrevivía con un golpe de él, y menos con lo que vi. El tipo era
denas nada -
é de arri
yo quiero que desaparezcas, lo harás de
uerza por un momento
areces? - le pregunté c
mar en la hogu
pero fui atrapada p
ame! - l
etandome con fuerza. el miedo atraezo mi cuerpo, el dolor
morir otra v
ó a los ojos, se veía emoci
sí? - me
ré profu
uí, aun esto intentando averiguar de qué se trata esto,
pensaba que estaba loca, pero me daba
frágil princesa
podía quedar aquí a averiguarlo, yo necesitaba salir de este lugar, ¡necesitaba hacer