El Amor en Tiempos de Traición
sión palpable, como si algo inevitable se estuviera gestando entre ambos. Alejandro, normalmente tan seguro de sí mismo, ahora parecía menos firme, sus ojos r
ar preguntarse si realmente quería saber lo que él tenía que decir. Había algo en su mirada que la hacía sentir vulnerable, como si est
ta de Lucía había tocado un nervio. Estaba dispuesto a ofrecerle una respuesta, pero sólo si ella estaba dispuesta a escuchar
resentes, pero había algo más que la empujaba a seguir adelante. Era la necesidad de entender, de llegar al fon
espondió ella, su voz calmada pero cargada de una sensación de resolución. No quería que
, cada movimiento que ella hacía. Parecía que estaba en una especie de juego, pero no era un juego s
i la conversación estuviera tomando un giro que él ya había anticipado. Su tono era misterio
a mostrar. Sentía que Alejandro la estaba llevando de un lado a otro, jugand
de admiración. Su postura era relajada, pero sus ojos, esos ojos intensos, no dejaban de escudriñarla. Lucía podía sen
r Corp, sobre mi familia, sobre mi vida... no es lo que parece. Y tú, Lucía,
volucrada en algo más grande, hizo que su mente se acelerara. ¿Qué quería decir con eso? ¿Acaso sus acc
orazón latía rápido. No podía permitirse mostrar vulnerabilidad, no
parecieran más confidenciales, más personales-. Es un imperio, Lucía. Y cada decisión que tomamos aquí, cada movimiento que realizamos, tiene repercusi
abía mucho más detrás de esas palabras, algo que Alejandro no estaba dispuesto a compartir tan fácilmente. El peligro de sus palabras era
r la mirada de él. El desafío estaba claramente presente en su tono, pero
i estuviera considerando la mejor forma de responder. Finalmente, se inc
estado flotando en el aire desde el momento en que se conocieron. No fue una declaración romántica ni una con
ara comprender si había escuchado lo que pensaba o si todo esto era parte del mismo juego. La urgencia en su voz, la
a calma a pesar del remolino que comenzaba a formarse en su int
ce a una elección, Lucía. La elección de lo que realmente quieres. ¿Vas a seguir siendo la espía enviada para destruirm
este momento marcaría el inicio de algo nuevo, algo que no podía controlar, pero tampoco podía evitar. El destino de Ferr
había mostrado tanto, o en la misión que había jurado cum
. Lucía tenía ante sí un futuro incierto, pero lo único