icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Violeta con V de Venganza

Capítulo 7 CRÁTER, LA COPA DE LA VENGANZA

Palabras:1709    |    Actualizado en: 19/07/2024

a parte blanca estaba moteada de rojo y las pupilas parecían cubiertas de una

er acercándose a Violeta ―¡Agh! ― se cubri

s ojos de encima al cadáver,

ia, tiene que venir, la pequeña ventanilla de metal en la puer

res, Andrómeda? ―una

jer de extraño nombre ―tienen que

y si esto se trata de algún estúpido plan para huir, les sugiero que desistan ahora ―la voz del guardia se mezcló

el escudo de Merintong. En la cintura llevaba un revolver, un cuchillo, un rolo y un radio, todo enganchado en un cinturón. Las botas le cubrían hasta la mitad de la pantorrilla, parecían

caron a Caelum de la cama. Andrómeda le s

―preguntó

guardia ―creo que quiere abrir algu

a se le llama "investigación" ―su

plantas dentro de botellas, frascos con ojos y otras partes del cuerpo, o con animales o con pequeños bebés sin nacer. Un caldero, Mesas con herramientas punzantes, instrumentos musicales y

de comida ―Pónganla aquí ―indicó, Andrómeda y Violeta hicieron un gran esfuerzo por levant

ó que todo a su alrededor se oscurecía, se sostuvo de

en del hombre de baja estatura estaba borrosa, era un hombrecillo todo gris de los pies a la cabeza;

arcadas y el vómito le subió hasta la garganta y se l

y su rostro afable, a Violeta no le parecía un pervertido com

la otra en unos minutos ―anunció el guardia. El maestre

a este año ―agregó cruzándose de brazo ―hace cuatro meses fue

Andrómeda ―susurró Violet

s son nom

s, lo sé ―inte

eres una much

con suerte, supongo ¿quién l

me parecía tan frío que hice una solicitud al comandante, acompañé la solicitud de un buen vino añejo adulterado con hongos de la felicidad y ahora, todas tienen nomb

con nauseas ―explicó Violeta y el hombre

uánto no

ción del tiempo, no sé cuan

esas palabras. La posibilidad de llevar en el vientre el hijo de Noah le producía sentimientos encontrados, se le revolvió de nuevo el estómago ―A menos que aún no hayas tenido coito, es muy probable que estés encinta ¿entiendes? ―Violeta asintió co

ó, puso el frasco debajo de ella y orin

co al maestre - no había ningún tipo de aparato e aquel agujero, solo he

rasco y tomó parte del líquido con una jeringuilla que hizo a un lado. Se inclinó debajo de la mesa y se puso de pie cargando consigo un rectángulo de cristal, un sapo dentro. Abrió la tapa, sacó al

ntó. La idea de tener un nuevo nombre, le atraía, le parecía que le ayud

tó encima de esta, los dos libros, el impacto produjo un ruido seco. Abrió uno de los libros, lo hojeó hasta que dio con la página que buscaba, repitió el proceso con el otro libro ―

lizó hacia abajo conforme veía los nombres, buscaba uno en especial, frunció

bre con el dedo ―quiero este ―el maestre ent

reguntó ―no suena mu

guntó Violeta y el maestre entornó a

cretó que una doncella debía ser sacrificada cada año para poner fin a la epidemia. Demifón declaró que elegiría a la doncella por sorteo, pero no incluyó en él a sus propias hijas

a de la sangre de sus propias hijas y un poco de vino, se lo dio en una taza; una copa ceremonial. Al descubrirlo, el rey ord

a frunció el ceño ―corres peligro en esa celda ―susurró y se acercó a la puerta, la abrió, y asomó unos segundos y la cerró despacio; sin hacer ruido ―las tres mujeres fallecidas eran compañeras de Andrómeda, no he conseguido

se abrió

aestre exclamó el mismo guardia

Obtenga su bonus en la App

Abrir