Rosemary lloraba desesperadamente al saber que Kendall había sufrido un accidente al enterarse de que tal vez jamás volvería a moverse, estaba asustada, pero a la vez decidida en estar con él, pues ella tenía la esperanza que tal vez ocurriría un milagro.
― Sé que Kendall se recuperara ― decía Rosemary viendo a Kendall postrado en esa camilla.
― Eso nunca va a suceder ― decía su hermano Robbie.
― Lo hará, yo tengo la esperanza viva en mi corazón, sé que los milagros existen, yo sé que Dios me escuchara ― respondía Rosemary con la voz quebrada sosteniendo la cadena que ella tenía.
― Rosemary Kendall que ha golpeado, no es alguien digno de ti, tienes que dejarlo ― decía su hermano haciendo que su hermana negara con la cabeza.
― Sonara masoquista, pero él no es así, el dinero simplemente lo cambio, sé que él cambiara lo presiento, sé que él será aquel hombre del cual yo me pueda sentir orgullosa ― decía Rosemary viendo a su hermano Robbie mientras que él no entendía a su hermana quería protegerla y esconderla en una burbuja ambas hermanas, pero tenían que respetar su decisión.
Por otro lado, Massimo hace a un lado a Annie, ya nada era lo mismo con ella, la fama y el dinero lo había cambiado, sin embargo, ella escondía un secreto, tenía una enfermedad mortal que no había cura.
― Es mejor que te alejes de mí, ya no te quiero no después de que me has sido infiel ― respondió Massimo sonando frío con Annie.
― Solo dame una oportunidad, dame 1 año para demostrarte que soy el amor de tu vida ― decía Annie con los ojos llorosos.
― No me hagas reír después de que me has sido infiel, ¿Te atreves a decirme que eres el amor de mi vida? ¿No crees que es algo tarde? ― respondió Massimo negando con la cabeza.
― Si me bese con tu representante fue por despecho ¿Acaso no hiciste lo mismo con la actriz? ― preguntaba Annie furiosa.
― Vete de aquí, Annie no te quiero volver a ver ― respondió Massimo haciendo que Annie agachara la mirada quitándose las lágrimas con coraje.
― Está bien Massimo que seas feliz ― contesto Annie tratando de sonar serena, pero también un tanto intranquila al ocultarle a todos su enfermedad, especialmente a su familia y a Germán.
5 años antes.
La vida de Kendall Schmidt
Un chico de familia adinerada o, mejor dicho, un multimillonario el cual era muy codiciado en los Ángeles, California; sin embargo, ahora estaba en las vegas disfrutando sus vacaciones con su novia Kate Wilson, una chica que solo le gustaba la vida material o mejor dicho era ambiciosa paseaban tomados de la mano un poco ebria dado por el alcohol que habían ingerido besándose apasionadamente cuando de pronto el teléfono hace sobresaltar a Kendall.
― Kendall tu madre te llama, necesita que te devuelvas del viaje el cual has hecho a las vegas ― decía Freddie al otro lado de la línea estaba preocupado por su madre que constantemente preguntaba por él. ― Me haces el favor de regresar, mi madre está angustiada por ti ― contestaba Freddie al otro lado de la línea.
― Tú quién eres para decirme que hacer, recuerda que eres un adoptado, no tienes derecho de decirme nada ― respondía Kendall molesto.
― Sé que no tengo ningún derecho, pero al menos ten un poco de respeto hacia mi madre ― contestaba Freddie furioso. ― Solo te diré que pasado mañana tienes que estar en la empresa ― contesto Freddie furioso colgando la llamada mientras que Kendall patea levemente la mesa, era evidente que ambos no se llevaban nada bien.
― ¡¡Odio a ese don perfecto!! ― respondía Kendall haciendo que su novia le sentara en la cama.
― Tranquilo amor, por lo menos nos queda una noche para estar juntos ― respondía Kate besando la mejilla de su novio. ― Adoro tu cabello todo ― respondía Kate sentándose en las piernas de su novio.