Salvó a su amante, no a su esposa
el hospital finalme
tamente a un departame
enth
as reforzadas con acero y
más seg
ra con mis colores favori
cado de un
a como una ce
sta? -p
bien
n el borde
apoyadas contra la p
ador sonó, cort
el monitor
ofía
se revolvió
qué es
Dante, evitando mi mirada-. El sistema de segurida
i voz elevándose-. Ha
sistió Dante-. Todavía está
accid
o que cubrió -dijo
r
; el sonido me r
eniza-. Tengo fierros en la pierna y un hijo muert
-dijo bruscamente-
jó en
trando tres malet
el traje de Dante
haciéndola parecer
¡Dios mío, tu pierna
ntó cómo
la estética
tados está al fondo de
su voz bajando a un ronron
e despreocupa
tto! -anunció-. Pa
la s
n la sala,
escu
ueteo de l
Dante
risa
da y g
e reía
a silencios
, era un
nte -rió Sofía, lig
hillo, *mi niña* -d
abra me
se de
mis m
la rec
leta de lona
paqué
mi pas
profesiona
rva de
ento para
recorte de perió
ante y yo en
un metro d
aba su
miraba
a foto en
é a la
la m
li
odo lo que realmente poseía c
hasta
estaban sirvie
an una
a feliz y
voy
a, con un tenedor a m
irte. El protocol
mi rostro una máscara de calma-. Voy
un guardia
r. El doctor dijo que neces
llevo
otto -dije-. S
u
a S
n ligero puchero. -Por favor, q
iró
r -dijo-. Vuelve
bien
hacia l
iré
al el
estacion
Marco, esta
acia, señor
e-. Al a
trón d
ecamente-. Conduce, Marco. O le diré a Dante exactamen
pali
nd
el aeropuerto, s
tó en
á ella? -La voz de
trón -mintió Marco. Yo le
y yo... vamos a la casa de seguridad ce
Pat
o co
ar a la fronte
do -dijo Marco sombríament
or la
pezado a
pués, la radio d
egro. El auto del Patrón. Se fu
frenó
s sa
vivo? -
firme, an
pachador a través de la estát
por el espej
spital,
mi ma
ia que surca
e-. Al h
ra sa
firmar l
ue me vi
despierto cuando sa
sta vez, nadie vendría a