Embarazada y Repudiada: La Traición del Alfa
pitando. El aire olía estéril, pero
ba en una cama de hospital, conectada a vías in
. Jaime estaba parado junto a la ventana, dándome la espalda, miran
voz era un g
Diosa! -Saltó, presionando el botón de llama
a en su rostro me rompió el cora
, mi mano moviénd
ba p
ón era ensordecedor. Era u
madre, enterrando su
al techo-.
e de la cama. Tomó mi mano. Su man
amiento por plata... la patada en las costillas causó un desprendimiento
se deslizó por mi s
aime-. Luchó duro.
loba interior. Necesitaba
o habí
r había destrozado algo fundamental. Ella no solo se había retirado; se había quedado en
surré-. No p
el dolor. Perder un cachorro... es lo más difícil qu
ido. Mi loba se había ido. Mi
ared. Sentí como si me hubieran vaci
niebla. Comía cuando me decían, dor
ije una mañana du
en el territorio de Rosa Negra de nuevo. Me estoy preparando para ab
vista de emoción-. Mi relicario. El que la abue
adrón a recupera
ir. Necesito verlos. Nec
on una conversación silencios
de mis mejores Élites. Si alguien t
el hel
gra, la atmósfera fue discordante. Había globos por tod
na fi
sto? -sise
la manada vieron a Jaime y se apartaron como
ada en una silla tipo trono,
unto a ella, sonrie
n cele
en una tumba fría, y e
sa vaciló. Dio un paso adelante, lucien
e sus padres habían hecho.
entre la multitud. Me vio y se burló.
entemente alto para que todos escucharan-. Después de
nido tan profundo
e te deshiciste del engendro de Rogue? Gracias a la Diosa. Es
tuvo. El silenc
uego a mí. -¿Muerto? ¿De qué está
ada. Ni amor. Ni od
en las costillas mientras usaba guantes de plata. Pregúntale cómo me
so pálido
eo -dije-. Tu h
el bebé de Elena
meciendo al bebé-. No dejes que es
No gritó. Solo habló, su voz
bulto en los brazos de El
ento de un Rogue, muchacho. Mientras tu
vez, la ilusión pareció romperse. Se inclinó, olien
o horror, amane
mi aroma -
ta. Había vis
dije a Jaime-. No
los gritos. Pero no miré atrás. La A
tero era alguien completamente diferen
or ven