icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Su prometida indeseada fue su verdadera salvadora

Capítulo 5 

Palabras:791    |    Actualizado en: 03/12/2025

ero su fantasma me ac

obel publicaba todo, relatando su esc

Dante sostenía sus sandalias de tiras. Estaba descalzo, con

i siquiera pasábamos en coche cerca de

úmeda, riendo mientras una ola los perseguía por la orilla. No

sobre la mesa. Había termi

e a la finca de mis

o del Don. Estaba sentado en su estudio, atrincherado en una fortaleza de

eglando rosas blanc

eclaré, co

encima del borde de sus gafas

na beca.

on un golpe sordo. -¿Lalan? Eso está al otro

se canc

sa que pude oír el tictac del re

gafas, doblándolas len

emente... queremo

ando a ese tono severo de consejero-. No puede

-dije con voz hue

a mi madre. Y mi padre... mi padre se vería obligado a elegir entre su san

s -dije-. Solo quer

Vio algo en mis ojos. Quizás vio el agotamiento hasta lo

voz baja, rompiendo su papel-

sobre mis t

mente al aparta

tanto como yo. Su esposo era un soldado, un sicario de bajo ni

ó boquiabierta en el mome

pediente. El embaraz

o, con la boca ligeramente a

e ella lo sa

S

ados a sus costados-. ¡Tú lo salvaste! ¡Yo estaba allí, Nina! ¡Y

dije en

obel del Monte probablemente se estaba haciendo la manic

porta

de un lado a otro, frenética-. ¡Está arruinan

a. Incluso si lo supiera... aun así se acost

. -Voy a matarlo. Voy a marchar a su o

a como un bisturí-. Hiciste

padre sabrá que estaba practicando medicina de

ágrimas en los ojos, derrotada

jar que crea que e

e colgué el bo

No quiero a un hombre que necesita

erta, mi mano flot

, Linda. L

en Monterrey que no se dé cuenta de qu

Obtenga su bonus en la App

Abrir