Casada con el monstruo
omedor. El suceso de ayer con el vestido magenta me ha dejado marcada, tanto que he desterrado ese color de mi guardarropa. Aunque Benjamin
amin. Dudo en unirme a ellos para el desayuno, sabiendo que mi esposo aparentemente me desprecia, pero deci
tras todos me miran, excepto
ñor Charles, a diferencia de su hijo, él
ara de felicidad, como es debido
iento un escalofrío. Desearía que fuera así, pero la realidad e
sto a su lado donde estoy sentada-. Nevaeh no está acostumbrada al ambiente del castillo, pero pronto lo es
..? -lo mir
amable ni frío, es una máscara en blanco-. Quiero que te adaptes mejor. Ya conoces algunas
garganta. Mis emociones se agolpan en mi mente, un
n alivio y calma, observándonos atentamente-. Pero hay algo
sonrisa se evapora. Benjamin aprieta l
amamos, nuestra vida marital es activa, pero teng
relación, pero ahora tengo mis dudas. Me doy cuenta de que el hombre que amo es un completo impostor. No solo me utiliza, sino que también le miente a su pa
al sea la razón de Benjamin, la comprendo. Nuestra re
así, me quedo
ero pero suave al mismo tiempo. Esto ha sido solo una actuación para él, y parece no cansarse de utilizarme. Sería ingenuo pensar que el se
señor James. Ese anciano de ojos dorados y cabello canoso no apartaba los ojos de mí. Al igual que su nieto, mantenía una expresión impasible, lo que me imp
cajar en este lugar al que siento que
ar de comer, Benjamin me llama a su
bituales. No sé si lo hace por gusto, por estrés o para aliviar alguna tensión. Me res
no agrio que utiliza-. No te hagas ilusiones con lo que
ticulo, des
parpadeando en sus piscinas doradas-. Lo de los tutores es cierto y est
etando los puños a ambos lados de mi cuerpo-. ¿Por qué eres tan cr
o -es
den-. ¿Te obligó a engañarme y a usarme de esta mane
eran patéticos e inútiles para un hombre como él-. No quería casarme contigo, fue la voluntad
uele tanto-. Dime... ¿Tenías que ilusionarme así? ¿Por qué n
dares. Nada ambiciosa, bonita, inocente, ingenua, encajabas perfectamente, y fue demasiado fácil para mí hacerlo, ya que
lágrimas de mi cara con rabia-. ¿¡Lo dic
or alguien como tú -sus ojos se oscurecen-. Esta
siquiera? ¿Cómo es que...? ni siquiera
ubo alguien, Nevaeh. La amo a ella, amor que no puedo darle a una joven tan ingenua
ntina-. ¡Dame el maldito divorcio! ¿Crees que voy a vivir así? No
paldas a mí mirando por el ventanal de su
Qu
. Independientemente de lo demás, nuestro matrimo
a. Siento que estoy a punto de colapsar-. Deja d
o en el cenicero-. Ahora vete. Te he dejado claro los puntos que
os a la cabeza, sintiendo que todo da vue
re de cabello largo aparece de la n
eñ
ión. Luego, prepara e
ia mí y por primera vez nos mira
el pasillo, asegurándose de que entre a mi habitación. Mis ojos se empañan de nuevo, palabras tormen
ma. Seguramente era de ella. Por eso me desprecia, por eso me odia tanto, todo fue por su padre, todo fue planeado para que la ca
sin importarme si el tipo detrás de mí m
itler, sino otra más cansada, más rústica. Cuando me doy la vuelta, Hitler ya lo ha hecho, y ambo
e e intento acercarme a él, pero Hitler interp
no le haga caso -me dice,
ciano, su voz un poco temblorosa ahora.
ir? -pregunto co
o que se refiere hasta que lo veo inclinarse para lu
orcejeando -¡Bájame ahora m
llegamos a la puerta de mi habitación. Entra y me
, poniéndome de pie -. Él quer
aviesa en mi camino. Mi nariz casi choca con su fornido
-retr
s mentales de paso -me explica con un tono suave y convincente -. Dice
ce un mo
e lo hace -interrumpe -N
temblando, al igual que todo mi ser en este momento. Benjamin ha dejado claro que no quiere tener nada que ver conmigo. No pudo decirme que su abuelo tenía tal problem
contrar la manera de hacerlo, sin importar lo que piense Benjamin. Aunque su farsa se desmorone,
ya no importa. Es absurdo que este matrimonio sea para siempre, hay leyes que lo regulan, y no pueden retenerme, especialmente cuando conozco la verdader