Crecer sabiendo que eres alguien especial, único en su especie, no ha sido fácil y más cuando te lo recuerdan continuamente.
He tenido una infancia feliz, rodeada de amor y cariño con unos padres que darían su vida por mí. Teniendo a el abuelo que tengo! nadie en el mundo me comprende mejor que él. Él es mi pilar, mi referente, es el espejo en el que siempre me quiero mirar. Siento adoración y se qué es mutua.
Al principio me sentía un poco sola pero todo eso cambio con el nacimiento de mi hermano Sariel, ese nombre le fue dado para rendirle un sentido homenaje a un muy buen amigo de mi padre. Creo que era un ángel como el y digo era porque se que está muerto, aunque desconozco el porqué? Si ellos son inmortales.
Sariel también es especial por su cuerpo corre sangre de angel y de lobo. En mi caso es algo más complicado, a estos dos últimos hay que añadir que también portó sangre de demonio, yo fui concebida cuando mi padre aún era un ángel caído.
Hoy es mi cumpleaños número dieciocho, mis padres tienen algo importante que decirme. Siempre he sabido que me ocultaban algo pero por otra parte nunca me ha importado.
Voy hacia mi casa, he pasado el día con mi abuelo y uno de mis tíos. Se me ha hecho un poco tarde, espero que no estén enfadados, no es la primera vez que llegó tarde a mi propia fiesta de cumpleaños. Lo se soy un desastre, pero es que me da un poco igual celebrar mi nacimiento todos los años.
Abro la puerta, todo está en penumbras y en silencio, tocó el interruptor y la habitación se ilumina.
- Sorpresa!! Gritan todos al unisono.
Me hago la sorprendida y les devuelvo una sonrisa, no quiero decepcionarlos pero es que desde que tengo uso de razón, todos lo años es igual, aún así no quiero decepcionarlos con mi actitud indiferente.
Recibo besos, abrazos y felicitaciones de todos los presentes, tengo un gran pastel en el centro de la mesa, soplo la vela y pido un deseo.
- " deseo que nada cambie, que todo siga igual"
Ese es mi deseo, mi vida está bien así, no necesito que nada nuevo aparezca y menos que lo que ya tengo cambie.
Pasamos un rato agradable, todos se retiran a sus casas, por lo que quedamos mis padres, mi hermano y yo en la sala.
- Les dejo estoy cansado, dice mi hermano desde las escaleras.
Mis padres me miran preocupados,vaya ya viene una charla, enumero en mi mente todas las cosas que he podido hacer mal en los últimos días, y no doy con ninguna tan grave para obtener esas miradas.
- Heba, hay algo muy importante que debemos contarte, te pido por favor que no me interrupas y que esperes a hablar una vez que haya terminado.