Kai y Josh se encontraban caminando por las calles bastantes aburridos. Ya era viernes, por lo tanto no tendrían clases mañana, así que podrían descansar.
-que haremos Josh, todos irán a fiestas o cosas así, y nosotros solo estaremos en casa- dijo un tanto aburrido Kai.
-podríamos ir a bailar, hace tiempo tu papá nos dijo que nos podía prestar un cuarto para poder ensayar- ánimo al chico de sonrisa rectangular.
-no lo se, no me gusta ir a su trabajo y molestarlo, ¿Qué te parece si ensayamos en casa? Nadie se encuentra en esta-
-me parece una buena idea- sonrió el de cabello rojo.
Al llegar a la casa de Kai, ambos cambiaron su uniforme escolar por algo más cómodo, fueron al estudio para preparar las cosas y así poder bailar.
Diferentes tipos de bailes sonaban por todo el estudio, ambos jóvenes estaba más que cansados.
-Josh, iré a ducharme, luego puedes ir tu si quieres, no tardo - el muchacho se puso de pie y se retiro del estudio.
Josh no se había percatado que estaban en el estudio del padre de Kai, habían algunos instrumentos musicales y grandes computadores con mezcladores. Uno que otro sofá decoraba de manera elegante la sala.
Josh sonrió al ver una fotografía del señor Mark con Kai en brazos, dios ese hombre si que era todo un espectáculo. Tenía unos brazos bastantes gruesos, y que decir de esos dedos, eran delgados, pero muy largos, y sus venas se notaban fácilmente.
Josh sólo podía pensar, que si así se nota la rama, imagínense en tronco, dios, Kai tenía un padre esculpido por los mismos dioses griegos.
Dejó las fotografías de lado y tomó su bolso, salió del estudio inhalando el aroma del Señor Mark, un aroma tan varonil, tan deseable.
Kai salió de la ducha con una toalla envolviendo su cintura, sonrió al ver a Josh sentado en un pequeño sillón jugando con sus pequeños pies.
-puedes duchar te ahora, yo iré a comprar algunas cosas para la cena, puede que tarde, pero mi padre debe estar por llegar, cualquier cosa que necesites puedes llamarme- Kai miro a Josh esperando algún tipo de respuesta.
-no hay problema, estaré esperando para luego ver películas o algo- Josh devolvió una sonrisa y entro al baño para poder ducharse el.
El pequeño cuarto tenía un leve aroma al señor Min, era mucho más fuerte el aroma a Kai. Se quito lentamente cada prenda lanzándola al suelo. Se sentía observado en aquella casa, tal ves era su imaginación, pero estar en aquella casa era talvez un sueño cumplido.
Ya desnudo, posó sus manos frente el espejo que tenía el pequeño cuarto. Observó cada detalle de su piel canela, sonrió al ver que ya no tenía nada fuera de lugar.
Su mirada viajo hasta su miembro y se detuvo ahí, por un momento imagino la mano del Señor Mark masajeando levemente este, dios, le fue inevitable morder su labio.
Automáticamente alejo su mano dándose cuenta de lo que estaba haciendo, entró a la ducha y dejó que cada gota se deslizara por su cuerpo.
Comenzó a recordar la primera vez que vio al padre de Kai, le fue inevitable enamorarse de él. El hombre era tan joven, con su cabello rubio, casi blanco y esa mirada de odio, se le hacía terriblemente excitante.
Muchas veces Josh se imaginaba como aquel hombre mayor que el, lo penetraba sin piedad mientras este pedía más. Se sentía realmente vulnerable estando cerca de él, y podría jurar que el señor Mark tampoco es tan santo como creen, después de todo cuando Josh iba a la casa del hijo de este, su padre lo observaba con descaro cuando supuestamente, Josh estaba distraído.