Esposa Virgen

cálido del centro comercial lo hace agradable pa

las manos y veían de todo y

n buscando el momento oportu

ía – le dijo él dist

l escape que ella tanto anhelaba. Sus ánimos estaban por el suelo al recordar los e

palabras de su padre molesto con ella — «si quiere conquis

pagara de manera descomunal para que se quedara trabajando para ellos y así enamorarlo, por

imo a una escalera y luego sonrió ante una estúpida idea. Aunque muchas de las estúpidas ide

le dijo y se soltó de

uno de los cubículos. Hizo cierta necesidad y

manos sin dejar de o

ilada?— le pregunt

para ocultar la verdad y dejó escapa

te escapas él morirá de amor por ti— las palabras

ien ¿Por qué está él aquí? Ambas sabemos lo mucho que él detesta estar en mi casa y en e

ue él había hecho tantos cambios a última hora y sobre todo porqu

entró a uno de los cubículos— así que no pienses que esos cambios son porque e

e hace su esposo para encontrar el hueco para huir y tal vez por es

movimientos de su esposo. Este hablaba y discutía en griego y sonrió. Eso fue lo primero que ella hizo por él cuando lo

la abuela Sophia está que no se cambia por nadie— cada palabra se clavaba en el pecho de la joven. Ya sabía

ba la vuelta y ella veía ahora su espal

entro del baño y cuando salió se encontró sola— ¡Maldita

efugió en un baño de hombres. Ahí se mantuvo por más de media hora. Sus manos l

cer algo tan estúpido. Luego de cambiar la voz y decir que el cubículo del baño para ho

centro comercial y esperar que Elián y su adorad

alió y entró a un almacén y compró ropa, un pijama, un sombrero y gafas oscuras

te tiempo he estado aquí»

un taxi y se dirigió a un hotel donde espera

nquilamente se dio un baño y en

e emocionado— ¿Ya estás en e

por aquel escape. Tal vez no amaba a Basil, y solo lo usaba

nsa y muy triste. También tenía dolor de cab

él a manera de broma— aunque te p

teza. Era lo que más

dejó escapar un largo suspiro

artamento a recoger algo de ropa y de ahí vamos

e sentía s

es me echaré un sueñito para cuand

se dio cuenta debió al malestar. La joven colgó el teléfo

e se levantó y abrió la puerta. Sus ojos azules quedaron ta

voz que parecía el aullido de un animal

entrando de golpe a la habitación —¿Dónde es

la situación solo se le ocu

o ella y se sentó en la cama porque le

la mirada turbia por los celos— acoso crees que n

de la joven se hici

voz— tú no tienes nada de

esta. Se posó la mano en la cadera abriendo la chaqueta

jo el hombre tratando

ido dejarte el camino libre para que seas feliz. El sábado se cumple el ti

torció la boca con

s obtenerla? No soy tonto, tú compraste un marido ahora te aguantas y sobre el sábado

ntada. Su cuerpo lo sentía agarrotado debido a

a fiesta?!— dijo y de repente se mareo y se sentó

con detenimiento y ve la pal

í hasta que llegue tu amante – l

oven vio a los dos guardaespa

joven que todo comenzó a ponerse oscu

hombre que corrió a sostener a la jov