HUERTO DE MALICIAS

Mayo 1991

una explicación. - la miró de p

sentó en uno de los sillones de mimbre, viendo a cualquier lad

ero y voy a contarte lo que pasó pero tiene

re con exasperación - Eres la mejor, pero dale me gustaría oír la explicación que me "quiere

sto de cariño y así comenzar a derribar el muro corporal que

que le llevara las llaves de su consultorio porque tenía que sacar unas medicinas para llevarselas a la señora, pues era muy querida y segun me enteré no tiene a nadie que la cuide. No me pude negar porque sabes como es mi mamá y eso era de urgencia... Salí a llevarle las llaves y traté de llamarte, cuando logré comunicarme a tu casa, ya no estabas. Fui al restaurante y no estabas, me cansé de dar vueltas, me molesté porque sabía que te ibas a enojar por algo que no pude evitar. En fin, regresé aquí y me aco

o pausado. Su expresión se había sua

a acariciar su espalda y su pierna al quedar sentada a su lado sin dejar nada de espacio entre ellos -

ar y fuimos al club a ver una obra de teatro.

avor - Vanessa pon

das cuenta? No podemos seguir así. - le tomó el rostro entre sus

e porque no nos vemos todos los días, si me vieras todos

dola y la besó. Ambos se pusier

estamo

pirar después - pero me muero de hambre - salió de su escondite, se estiró, dio media vuelta y la

-*

comer. Era increíble el deseo con que devoraba la comida. Se quedaron convers

que los encuentre solos, ya saben como es. Karina anda inventando cosas

n solos. Karina estaba en su habitación escuch

a sin estar juntos. ¿Vez lo que te digo?... - le acariaba el brazo que reposaba en su regazo con la yema de los dedos, un roce superficial y leve como el roce de un

la nuca. Lentamente la calidez de su lengua zurcó la frontera de su propia boca deslizándose por el labio superior de la ella para luego chupar suavemente en retirada. Repitío el recorrido de su lengua ahora por el labio inferior provocando un s

u boca paseaba por su cuello a una velocidad tortuosa y precisa. Con la técnica especial que según Vanessa ya había comp

urar su boca y esta vez poder dominar ella el beso. Después de unos minutos entre besos y caricias olvidaron que estaban sentados en uno de los muebles de la terraza.

ó sobre las piernas de su chico sintiendo la rigidez de éste contra su muslo. Él le levantó la camiseta para meter sus manos y sentir la piel de su espalda directam

asta la oreja y dando el trato especial a esta - me gusta todo d

gitada. Había caído en cuenta de que no podían

ué p

regaso y trató de acomodarse la ropa - Esta noche resolvemos este detalle. Ahora a

uiero malos entendidos, ni llamadas

eto que no habrá excusa que me impida tenerte para mi solita esta n

a universidad. Estaba sentada frente a su

asa de campo y ni siquiera me lo habías dicho. - Irene acabab

incipio fue bueno pero te juro que lo que tuve que hacer en muchas ocasiones no era tan divertido: asear la cocina, los baños, trabajar en la lavandería y servir en los restaurantes. Lo que si me gusta de mi carrera es el contacto con la gente y el conversar con los turistas, la administración y organiza

? ¿Estan peleados? Pensé que

mucho tiempo sin estar juntos y es algo difíc

así están

rta aquí ¿Te imaginas que estamos de

n la viera con esa carita de yo no fuí - Vanessa s

Mami que salgo tarde de clases. Si me llama Sally dile que ma

e Irene y Vanessa era muy cercana. Aunque le contaba todas sus cosas a su prima, a veces, prefería no hablarle tanto

-*

: 8:

ía que hacer en la universidad. Una vez vio el

amor! -

nde e

con tu mal humor ¿Por qué mejor m

oró la incomodidad de su novia ¿Qué le estaba ocult

leves a un lugar tranquilo, disfrutar contigo de una linda conversación... - le besa la mejilla - que me des mucho cariño, muc

r tanto. ¿A dónde quieres ir? - otra p

ar y la brisa nos acaricie la piel... - le dio otro beso en la mejilla. Él conducía despacio. Había

comer ahora

ssa hablaba de su experiencia en el

vino metida en una cubeta con hielo y dos copas. Saca

, o acaso ¿le falta algo

rsar y respirar el aire puro del mar. Vanessa se quitó los zapatos y los cogió en una mano. Pasearon. Conversaron de todo un poco. Jaime puso vino en las copas y se sentaron debaj

parar. A él le gustaba escucharla, porque sabía que ella le contaría todo lo que él necesitaba saber para

e tienes razón cuando dices que las ganas de vernos son más grandes porque estamos mucho tiempo separados, pero por otro lado, cuando estamos juntos soy tan feliz que me gustaría

o con cuidado. Sus labios, sus manos, su piel, su olor. Lo disfrutaba tanto que se olvidaba del resto de universo. Él recorrió lentamente la cur

y comenzó a quitarse la blusa, botón por botón, él se quitaba la suya botón por botón con los ojos clavados en los de su chica. Se quitó la

os senos por encima del sostén y sus pezones se pusieron en alerta. La miró a los ojos y sonrió. Subió la copa y brindó a su salud, roció todo el contenido por su pecho y v

evitar que hic

-*

: 10

sin importar el lugar era un afrodisíaco que no habían experimentado. Con la luna menguante como testigo pudie

lo haces? Tienes que haberlo plane

- se movió un poco pa

ncreíble, completamente maravilloso señor, de ahora en ad

n eso? ¿Acaso hay otros

tienes que analizar todo lo que digo. ¡Relájate! - le dio un b

-*

: 11

n la entrada de la casa, ambos se

a ir con

avor es una vieja amiga del colegio tenemos años sin vernos.

No pierdes oportunidad de salir por ahí a no sé donde, con no sé

miscúos y degenerados en San Francisco, es solo una visita a una amiga. Te prometo presentártela cuando regreses de Santiago. Si no fueras tan responsable a lo mejor

ja amiga, no hay problema. Yo no puedo dejar de ir a Santiago porque es imprescindible traer esos materiales para el lunes o si no perdemos el cliente. No puedo delegar este viaje

pasantía y graduarme. Necesito distraerme un poco. No me hagas sentir culpable por querer salir con mis amigas. Además aprecio mucho a Sally no me gustaría hacerle un desplante luego que se tomó la moles

iga no te preocupes por mí. - le dio un besito, dio media la vuelta para dirigirse al auto. Ella lo ob

yo voy a pensar en ti veinticinco horas al día, por si estas muy ocupado pienso por los

ién cuída