Un estrella en mi recuerdo

ofesores y saco buenas notas. Nueve meses de casados, nueve meses tirados por la borda. Seguimos aparentando lo que

puerta de muchos negocios, aunque me da la impresión que no es de agrado de muchos de sus nuevos socios. Todavía no sé que beneficios le dio a mi familia este enlace, nuestros hoteles son de

ay nada, no hemos hecho nada que luego tengamos que arrepentirnos. Hablamos, conocemos cosas el uno del otro, puedo decir, que es mi mejor amigo, aunque también tenemos una qu

, la noche en que le fui a buscar. Es más, duda que haya podido hacer n

con su trabajo. Gracias a los estudios, el día me pasa rápido, he tenido clases online y presentar un par de trabajos. Los e

que recoger mis apuntes, para que no los vea. Salgo a mirar quien é

ro en papel, porque en mi cama, no

e condiciones estás, tenemos que ir a la fiest

ar, son más hombres. Hace amago de acercarse y levantarme la mano,

mo que haces en esta p

ojo toda la ropa y neceser para esta noche. Me voy a casa de mis sue

de está Beltrán? –me pregun

Él…-me callo cuando veo sa

mi suegro, voy a fastidiársela –ha

ba bien –miro d

o hubiera visto en esas condiciones –venga, dime porque no iba a venir –dice mientras viene hacia mí. Doy pasos para atrás –diles, esta

gro –no sé que negocios tienes con mi familia, pero lo siento mucho, voy a pedir el divorci

anni, tiene la voz furiosa y

nadie. Solo sabe decir que no valgo para nada, insultarme…me cansé. Es la última fiesta que acudo como su esposa, como parte de

fuera por mí, dormirías en la calle –me sigue gritando, su madre no da

en la cara, está enfadado y no es para menos –me decepciona saber, en lo que te has convertido. Erika, por los negocios no te preocupe

erdad, no quería sacer a relucir todo esto –le digo acercándome –

mala nuera eres, mala, mala –dice alejándose con la

Pero papá tiene razón, no n

a la fiesta. Erika, querida, ya sabes cual es tu cuarto. Un sueño, un baño y estarás reluciente –me coge de l

chísimo. No quiero e

todo lo ocurrido. Tendré que hablar con mis hermanos, ellos me ayudarán a salir de tod

….-le digo mientras me

ahora mismo. O

sa no es…-s

dio enfadado. Le abro y le sonrío. –si me llegan a

rté mal. Si quieres me puedes castigar –

-me dice poniendo sus brazos en

entras rodeo su cuello y a la vez, salto

, mi reina –dice con nuestras bocas devorándo

gas tuya -enserio dije yo eso? Mi

entímetro de él. Me quita la camiseta y desabrocha la falda, dejándola caer al suel

tener vidas suficie

sobre la cama. No dejamos de miramos, le pido que me deje quitarle la ropa, me dice que no, yo quieta y que me deje hacer. Veo como se quita la ropa. Admiro ese cuerp

ue disfrutes de cada momen

se hace, se nota su experiencia, en cambio yo, no sé ni donde poner mis manos. Llega a lo

oda la noche, para mí sólo. Que viendo los

me gusta. Me quita despacio las bragas y me pide que abra las piernas, le obedezco. Mete sus dedos en mi inte

ia, pero te juro que estoy a punto de explotar –se ríe, mientras me vuelve a pegar la espalda a la

? –asiento. Estoy nerviosa, siempre oí decir que ese momento

piraciones cada vez se aceleran. Se para,

icos besos de Giovanni. Se para, deja de moverse, hasta que le digo que siga, que no me duele. Mis lágrimas, son de felicidad. Me

ta decírselo, es la verdad y no

ro mi be

a cama. Sin hablar, solamente notando sus caricias

milia, nadie sospecharía na

baile, caballero -pega su torso en mi e

s mía, solamente mía –me susurra en el oído. Le respondo con un beso

ros al descubierto, en palabra de honor. Pelo recogido, pero a la vez despeinado, echo por mí, no iba a salir muy bien. Sin más accesorios, no me van mucho l

tá esperando Enma, que al

ncuentres. No puedo seguir con todo esto. Las humillaciones d

astante, para que tengas que enfrentarte a ellos –me da un beso –vamos al salón. Vino una invitada de últim

familia. Beltrán sigue con la copa en la mano, la levanta hacia mí, como haciendo un brindis. Giovanni me come

de Giovanni -me dice. Mientras miro a éste, que niega

o. Giovanni me ofrece una copa de vino, nuestras manos se rozan, s

en esta vida –me dice tan fresca. Luego se gira a mi suegra –tengo que decirles algo, ya que estamos entre familia, es el mejor momento –se coge a Giovanni, me entran unas ganas de

o, no estamos juntos. Eso es mentira!! –le

como todos la abrazan, felicitan a Giovanni. Él me busca con la mirada, niega con la cabeza. Mis lá

mi hermano Carlo. Le e

esaparecer. Irme l

e la casa de tus suegros. Coge lo que

o, aquí