La mujer de los tres dominnantes
río había transcurrido por todo
ió el rostro y s
manejar la situación. Aparte de estar her
hacer?», se cuest
él, que era una persona demasiado sec
que se le ocurrió decir, y se d
lzó la mirada y mientras lo veí
palabras. Se sorprendió, pero fing
se sentía incómodo por no comprender exactamente qué decir. L
tengo
a esa fuerte conmoción, intentó pararse, pero solo pudo dar un paso y cayó. Es
ída, se giró de inmediato,
uejó la joven y se enro
sde lejos se le quedó viendo completamen
sus miradas. Por un momento sintió algo extraño. Ella tenía un
él pensó, de que la muchacha debía morir, sin embargo, detrás de ese duro pensam
un chico normal. ¿Pero que podía hacer? Él había
primera vez compasión p
o levantarla, posicionando s
amó la chica de nuevo, al
detuvo y la volvió a dej
a un momento
uele mucho? ―preguntó ell
upiera nada de lo ocurrido y si
ubio y la apretó con fuerzas. Jackson, únicamen
obaba unos cólicos intensos, era como si se le ab
envuelto en ese raro sentimi
asaba la joven, se detuvo. Ella la
ganta, y alejó velozmente su mano de ella. Él ya d
pretando los labios, y luego esta
nfundido. Él había considerado de que por fin, se había
suceder ―respon
oven, se mostró u
impresión, abruptamente se
nces, expulsando un resoplido de cansanc
, ¿Cómo
s ojos con mucha pena―, y
acia sus piernas, e inició a sentir el olor. El
taba», refunfu
e sintió algo de lástima por la chica. Como
cargo a la pelirroja sin nin
―dijo ella, mirá
―le respondió con
, era inevitable
to... ―replicó cubrien
que se encuentra en la parte de atrás. En este lugar no contamos con d
stro, asintió. Entonces Jackson, si
o con cables de luz para las prendas lavadas. El rubio, sin detenerse, jaló una sábana y l
Y la chica sobándo
la de pie, pero sus p
mantenerte de pie? ―refunf
egó ap
fastidio y respiró hondo. Jackso
dré que ayudarte,
a, no respondió. Pero claramente e
la sábana aún lado, y luego la cargó
hubiese dejado a su suerte, sin embargo, el trato que había hecho con C
sí. Lo que más odiaba en la vida,
í que aprovecha a enjuagart
spondió ella s
sicionados frente a frente, en un
a la rapidez que podía, se sobó el rostro, el cabell
inuto, ambos salier
rió, porque se había percatado, de que
, se abrazó con sus
. No tengo el interés de prestarte atenció
de ella, la sostuvo de nuevo de la cintura y consecutivamente,
l de la cintura de la mujer, su piel e
omenzó a masajearse con mejor precisión. Terminó retir
o obstante, sin prestar atención a esos golpes, por alguna razón se ruborizó. Resulta que
nveniencia, ella n
su mirada, en un solo mov
ciendo?» se cuestionó
detallado casi todo el lugar, evitando
cuperar memoria con la actual situación que estaba afron
son interrumpió la s
a sus sentidos, a
a comenzando a aumentar, a
le dijo forzando su voz lo más serio posibl
uego enrollarla en la sábana. No podía dejarla dent
o ―respondió la mujer, co
sostuvo entre sus brazos o
rostro de la bella mujer, que, estando entre sus bra
? ―cuestionó de repente
ú y yo no
s que se
or ―respondi
on, en tanto la sentaba de nuevo e
ecejo, ahora se sen
esta persona que no me conoce me est
uego de forma despreocupada cogió la sábana doblada y
dad. No pudo evitar ver el resto de los incontabl
sostuvo de los brazos y le ayudó a quedarse de pie. Comenzó a acomodarle l
de inmediato, al reconocer el pequeño colla
se
mpresionante, ya que su amigo nunca le gustaba quitárselo ni siquiera para bañarse, específicamente por ser un regalo que la había dado su madre.
―Jackson,
ella, cubriéndose con
había pensado que él le
das ―replicó él, poniéndo
rubio, solo la cargó d
*
a ropa de
e notaba que era suyo. Él no quiso traerle las blusas de su amiga, porque creyó que serían muy obscenas para ell
mi amiga no tenía nuevos, pero si tenía
gradecida, pues sentía que el chico ya e
cambiarte, así que aprovecharé a
comenzó a recuperar sus fue
inmediato. No intercambiaba palabras con ella, únicamente cump
tanto. La muchacha tenía otras cosas en que preocuparse, c
s de las medicinas, aunque para ser exactos, en esos pocos minutos que ella podía soportar es
idió levantarse y salir. Estar alejada de todos y
scuchaba música a lo lejos y pres
entura en el lugar. Deseaba encontrar a J
los focos quemados, ella siguió su tr
rque llegó a salir victor
y exhalo con fuerzas. Al fin sentía
ncendida. Alrededor de ella, se encontraban unos veinte chicos aproximadamente qu
sobando sus mano
eres? ―cuestionó un ch
o.
llamas? ―le bromeó, al ve
. no
clamó, y la sostu
po de ella, la hizo entrar en pánico. Pequeños reflejos mentales de un hombre hacié
on el intenso temblor reflejándose
or qué no te he gustado?
ntestó des
pronto un voz de
kson, con ese semblante oscuro,