Los arrepentimientos del Alfa dominante
que pareció una eternida
rnas eran el recordatorio brutal de que mi calvario había sido real, por má
a a mi lado,
sumida en la confusión, la
a tantas mujeres de la manada, solo pude sentir
ía que pasar
ese momento, un fuerte alboroto estalló al ot
habitación, encabezado por Robbin Co
es de mi ropa e intenté cubrir con d
n, quien frunció el ceño mient
el pecho y la cabeza gacha. Temblando de miedo, me m
s haces aquí? ¿Cómo te atreves a desaparecer del banquete para revolc
e pasar desapercibida, pero un instante después, u
chasquido retumbó en el silencio y mi
e Alyssa Ortiz me taladró los oídos
oponer la más mínima resistencia. Una sen
areja legítima de Killian, y yo sabía muy bien lo peligrosa que podía llega
y lárguense de una vez!",
a manada Black Moon se atrevía a desafi
rofundamente decepcionado. Tendré que reevaluar mi dec
a advertencia, él
un lado, abrazándome a mí misma y con la cabeza gacha, sin atreverme a pronunciar una
lminó con la mirada, como s
uerza; mis piernas flaquear
pude vislumbrar al lobo en su interio
cargada de malicia: "¿Me tendiste una t
respondí con la voz entrecortada: "
mano se cerró en mi cuello, ce
ra loba en ser destrozad
de atacarme con sus garras, simpl
lo seguí a trompicones hasta que me arrojó fu
espalda, su voz rugió: "¡Lárgate! ¡No vue
con dificultad, sintiéndome torpe e inestable
habitación, varios sirvientes s
ijo uno. "¡Logró seducir
una cualquiera
es, además, me lanza
devoraban con la mirada, Killian cerró la puerta s
n esperanza. ¿Por qué tenía que pasarme todo esto a m