El Marco del Marido, la Feroz Justicia de la Esposa
después de que Álex se fuer
papeles-. Su esposo firmó el papeleo inicial. Indic
sa, mirándom
n diagnóst
estaba construyendo una narrativa. La exconvicta
cara. Suspiró y sacó un expedien
ne una úlcera perforada. Está
cla de lástima y de
dición preexiste
un compañero constante. Recordé habérselo contado a Álex durante una de sus breves visitas previas al juicio.
amo, Sofi. Siempr
ch
se habían ido, gastados en abogados que Álex h
opción. Tení
al segundo
Sofi? Estoy
dije, mi voz plana-
fue pesad
con lo que estoy lidiando ahora mismo. Catalina e
lorosa. Luego el tono de Álex cambió
Estoy aquí. No vo
entras yo yacía en una cama de
que sea que pensé que teníamos, finalmente se marchitaron y murieron. El dol
imiento era demasiado pr
se desgarró de mi garganta, cruda y llena de desesperación. Reí hasta que me dolieron lo
estuve compl
ente, entró una e
a sido pagada
ompañera de celda. Mi amiga. La única persona que me cubrió la espalda dur
stazo y soltó
carajos te hiz
de cigarros sobre
de la
fue un extr
ardo? -preguntó, encendie
a? Lo pensé. Pensé en el hombre con el que me c
eron en una leve so
uiero que lo pierda todo. Su carrera. Su reputación. S
nrió Ximena, soltando un aro
oz ganando fuerza-. Necesito una nuev
de Ximena s
Flores?
ado. Entró corriendo, fingiendo pánico, exigiendo ver mis expe
uró que el procedim
io inundando su rostro. Realmente parec
cama, como una esp
Fingiendo que te importa ah
stre
eso no
lado, tratando
me falsificado, culpando a un interno demasiado en
los suyos-. ¿Lo despidieron? ¿O solo le diste un s