EDWARD COLLINS
io, al llegar fui directo a mi casillero, saqué mi bolso y me encaminé
ene mi madre qué decirme no me va a gustar. Entonces sin perder más tiempo caminé en dirección a la sal
espectacular auto frenó enfrente de mí. Juro que los intestinos me llegaron a la garganta, pensé lo peor,
octor Collins bajó de su auto para abrir
lar-. Además no puedes seguir esperando aquí sola, está o
s casi no salían de mi
Puedo ayudart
no es nada, n
r auto me detiene tomándome por él c
stás temblando y no hace frío. Puedes confiar en mí Let
no es por usted; me disculpo si
nqui
dea el auto y luego sube él. De pronto, en un movimiento rápido se gira hacia mí y me ayuda a coloc
equeña, pued
el aire en mis pulmones, se ríe y es preci
Google Maps, por favor. Así
en marcha, luego de unos cort
y salva. Ya puedo
r con lo qu
por traerme, d
mí, pero quiero p
ed d
arme. Para tí soy Edward
a, jamás me había reído con un hombre e inclu
íe-, pero en la clínica
sionalismo ante todo-sonr
ridad extiende su mano y yo dudo en tomarla, pero finalmen
ero de teléfono?-se rasca la
sorprendida que
te digo que solo ten
do lo que sale de su boca. No debería creerle, los hombres s
ie como una tonta cayend
bien-c
y dejó un beso en el dorso de ella, en ningún momento apartó sus enigmáticos ojos azu
spedí de él para que no se le hiciera más tarde, y cuando iba
me dice me hace levantar la cabeza sorprendida, -. Quiero q
Todo está en orde
si son
y emociones que jamás había sentido. Las mariposas revolotean en mi inter
e irse deja un beso en mi mejilla y me q
l estar adentro aviso que ya llegué, subo como de costumbre a mi habitación, me doy un baño y me visto con un
e que la miro me pide sentarme, lo hago y sirve la cena para ambas. Ella toma asiento y no
lmente pregunto y me preparo mentalmente, pues, algo me
y cansada. Entonces ha llegado a mi vida un hombre maravill
e?-las alarmas se ac
n, tu padre-dice
dito a lo
la cabeza-. ¿Cómo puedes pensar en volver con ese ser asqueroso y despreciable? Y encima dices que es
ro, observa bien el en
ancaba la cabeza
eso tú quieres vivir con ese hombre nuevamente-continuaba sin mirarme y prefería que no lo hiciera-. Solo te diré una cosa, ya pasé por esto una vez y no volveré a pasar por lo mismo-emp
e busca donde comer, porque no cocinaré para ti y mucho menos dejaré que tomes algo de la nevera, todo lo
entonces a ti también te desprecio por dudar de mí, aún así aquí estoy contigo apoyándote y encima quieres
ágrimas salían de mis ojos y corrían por mis mejillas a raudales, me sentía sola, herida y si
decisión tomada de dejar todo atrás y empezar de cero sol
mejor amiga desde hace más de dos años, pero me avergüenza contarle mi verdad, temo su reacc
sar solo en ella? La odio, aunque no quiera llena