Hoy día el sol brillaba más que otros días, el calor era intenso, pero hacia un día maravilloso, quedé sentada en la banca del patio de la universidad.
Es una costumbre mía venir aquí a asicalarme bajo el inclemente sol, el resto de chicas huyen despavoridas para que el sol no las toque con sus rayos, a mi eso no me afecta, pues siempre me impregna de una energía espectacular.
Mi móvil vibra tajantemente, es mamá que me llama por qué quiere que regrese a casa a cenar en familia.
__¿Mamá, no te he dicho que no puedo ir a casa? __Ella alega extrañarme mucho, quizás así sea en verdad, pero no del todo cierto.
Miro la hora en el reloj de muñeca y respondo a mamá en tono algo agraviado, __¿Sabes qué mami? Papá y tú debieron tener a más hermanos míos, así no se hubieran codependido tanto de mi.
Y hablando de mi Madre, una mujer de 38 años, hermosa, no parece ser mi madre cuando está cerca mío, casi todos la confunden con que es mi hermana.
Yadira es su nombre, una mujer guapa, sofisticada, muy elegante y aristocrática sobre todo.
No e salido en citas desde mi adolescencia que fui con una amiga y todo fue un fiasco, el chico terminó declarándose a mi amiga, se suponía que estaba allí por mi, pero así son las cosas a veces, las cosas no salen a como uno quiere, de esa experiencia aprendí que no debo aceptar salir con alguien solo por el hecho de que me inviten.
Volviendo a lo de la invitación de mi madre, no tengo razones para rechazar la invitación a comer en casa, sin embargo mi mamá quiere presentarme al hijo de su amiga que ha vuelto de Londres.
Según ella es soltero, caballeroso, etc etc, estoy enterrada en mis propios pensamientos cuando de pronto se acerca un joven estudiante, su rostro podría compararlo a una cara tierna y hermosa, no tiene facciones duras de un macho potente, él es todo lo contrario, su cara es muy tierna, compararía a la de un bebé sonriente.
__¡Hola! __Me dice con su gran sonrisa de oreja a oreja.
__Respondo__Hola.
__¿Puedo hacerte compañía?__Pregunta con una mirada que me convence, es que tiene una carita muy tierna.
Cómo no respondo y quedo perdida en mis pensamientos, me vuelve a hablar.
__Quiero hacerte compañía ya que te veo muy sola. __A veces uno mismo busca un poco de soledad, estar consigo misma, tonto, pensé.
__¿Puedo? __Me pregunta de nuevo. Ya está sentado y todavía pregunta si puede, pensé.
__¡Oye, ya estás sentado no!__Respondo, él sigue sonriendo conmigo. A lo largo veo a un grupo de estudiantes mirándonos fijamente están hablando entre si mientras se ríen.
Pasamos unas horas sentados hablando de cosas sin importancia, la verdad es que no me molestó su presencia, al día siguiente él me buscó de nuevo y así sucesivamente se hizo un cohala pegado a m, no le pedí que se fuera, ya que no me irritaba, aparte no era desagradable, según él me contó sobre sí, era un estudiante de intercambio.
A las siguientes semanas al ver que no iba a casa, mamá vino a verme, todos en la clase estaban perplejos de la madre que tenía; ella era todo lo contrario a mi, jovial, encantadora, carismática, bella, sobre todo hermosa, atractiva, a mi madre no le hacía problema mostrar sus atributos tan mágicos, mamá era dueña de un par de hermosos pechos.
Al fin, desde ese día empecé a oír por los pasillos, que que cosa rara era yo, que si era adoptada, que aquí, que allá.
A mí nunca me gustó llamar la atención de las personas, me gustaba estar tranquila en mi zona de confort así que al llegar mi mamá y hacer semejante embarrada, tomé la desición de largarme fuera del país.
Esa noche, en la cena lo dije:
__Papá, iré a Harvard a estudiar.__¿Qué? dijo él.
__¿Por qué ahora esta desición, cariño?
__¡Creo que no quiero distracciones con mi preparación, mamá seguirá insistiendo que tenga novio a fuerza si sigo aquí! Así que...
Mi madre empezó a sollozar. Luego me miraba a mí y se quejaba más todavía. __¡Pero mira que haces Jess, tu madre solo quiere verte feliz y casada!
__¡Papá! __Dije en una sola voz fuerte y conciso.
__Por una vez en sus vidas, déjenme tomar mis propias desiciones, no estoy enamorada, no quiero casarme aún. Quisiera que mamá y tú respetaran esa desición.
Papá me miró incrédulo, era verdad que mi padre se volcaba al ver a mi madre derramar una lágrimilla, no lo soportaba, y siendo sincera, creo que mi madre se aprovechaba de ello.
Me puse de pies, dije de imprevisto. __Mamá deja el drama.
Ella sollozó aún más, si no supiera que ella era mi madre, diría que ella buscaba deshacerse de mí.
A las siguientes semanas salí de casa y fui volando al País de los Estados Unidos, hacía mi nuevo destino por ahora.
Que cosa, cuando llegué, vi a mi amigo, al joven entrometido cara de cachorrito, si él, me sonrió con amplia sonrisa. Yo estaba muy confundida con él.
Al paso de los días después que me hablara, él había cambiado de amistades, dejó a sus antiguos amigos, empezó a andar solo conmigo, después supo de mi intención de venirme a Harvard a estudiar, y aquí está también, no sé realmente que desea, pero tragó saliva.