En una ciudad a los alrededores de Oceanía, una madre estaba despidiendo a sus hijas, cinco chicas que emprenderían un nuevo camino para vengar la muerte de sus familiares. Que ellas habían planteado hace mucho tiempo.
—Las he entrenado personalmente para que ustedes cinco se encargarán de vengar el apellido Rodríguez destruyendo a los causantes de la desgracia de nuestra familia —indica la madre con seriedad, esta postura no era algo nuevo de ver para las chicas ya que fueron criadas por una madre con carácter y orgullo.
—Solícito permiso para hablar —habló la hija mayor con respeto a su madre, ella era conocida entre sus hermanas como la líder después de su madre. Catalella Coleman, tenía la misma postura firme y con carácter de su madre después de todo ella se encargó que la chica creciera de esa manera.