Más Allá del Zapateado: Mi Venganza

Más Allá del Zapateado: Mi Venganza

Gavin

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En la gala benéfica de Sevilla, esperaba una noche de brillo, pero para mí, Lucía, se convirtió en mi ejecución pública. El subastador presentó un "lote misterioso": un vídeo íntimo mío, manipulado para insinuar una vergüenza. Mateo y Javier, mis amigos de la infancia, no solo lo permitieron, sino que lo celebraron, ofreciendo mi humillación a Sofía en bandeja de plata. Corrí a esconderme, solo para escuchar sus voces arrogantes: habían planeado todo para quitármelo mi puesto en el Ballet Nacional en favor de Sofía. Descubrí que mi "mala noche" de hace dos meses, la bebida extraña, la confusión al despertar, fue obra suya. Los mismos a quienes protegí con mi silencio, por quienes mi madre murió, eran mis verdugos. Cuando la subasta del vídeo alcanzó cifras obscenas, me negué a comprar mi propia vergüenza, desafiándolos públicamente. En mi desesperación, tras la filtración viral del vídeo, mis maestros me detuvieron justo a tiempo de acabar con todo. Pero mi madre... mi madre, la que ellos mancillaban, la que murió por salvarlos, me había dejado sus zapatillas rojas. Volví a la hacienda para recuperarlas, solo para encontrarlas en los pies de Sofía, y Javier me golpeó brutalmente. Me escupió la mentira que me atormentó años: "Tú mataste a tu madre". Con mi cuerpo roto, sin nada ya que perder, decidí que era suficiente. Me fui de Sevilla sin mirar atrás. Cinco años después, soy la bailaora principal de "Alma Rota", un fenómeno global. Ahora es el turno de Sofía, Mateo y Javier de enfrentar su propia humillación pública.

Introducción

En la gala benéfica de Sevilla, esperaba una noche de brillo, pero para mí, Lucía, se convirtió en mi ejecución pública.

El subastador presentó un "lote misterioso": un vídeo íntimo mío, manipulado para insinuar una vergüenza.

Mateo y Javier, mis amigos de la infancia, no solo lo permitieron, sino que lo celebraron, ofreciendo mi humillación a Sofía en bandeja de plata.

Corrí a esconderme, solo para escuchar sus voces arrogantes: habían planeado todo para quitármelo mi puesto en el Ballet Nacional en favor de Sofía.

Descubrí que mi "mala noche" de hace dos meses, la bebida extraña, la confusión al despertar, fue obra suya.

Los mismos a quienes protegí con mi silencio, por quienes mi madre murió, eran mis verdugos.

Cuando la subasta del vídeo alcanzó cifras obscenas, me negué a comprar mi propia vergüenza, desafiándolos públicamente.

En mi desesperación, tras la filtración viral del vídeo, mis maestros me detuvieron justo a tiempo de acabar con todo.

Pero mi madre... mi madre, la que ellos mancillaban, la que murió por salvarlos, me había dejado sus zapatillas rojas.

Volví a la hacienda para recuperarlas, solo para encontrarlas en los pies de Sofía, y Javier me golpeó brutalmente.

Me escupió la mentira que me atormentó años: "Tú mataste a tu madre".

Con mi cuerpo roto, sin nada ya que perder, decidí que era suficiente.

Me fui de Sevilla sin mirar atrás.

Cinco años después, soy la bailaora principal de "Alma Rota", un fenómeno global.

Ahora es el turno de Sofía, Mateo y Javier de enfrentar su propia humillación pública.

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