icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

No te esperaba ¿Cómo ser mamá soltera y no morir en el intento?

Capítulo 3 Una víbora en tacones

Palabras:2429    |    Actualizado en: 18/03/2023

nta Mark, dejando caer sobre su escritorio las carpe

i mejilla sobre la madera fría de mi escritorio. M

clea a la velocidad de la luz, en su teléfono.Tal parece que le importa más su conver

bién me siento orgullosa al saber que la propuesta en la que habíamos trabajado durante semanas, al final, logró convencer al c

ar. sin pensarlo, mi mente comienza a divagar en tonterías, como el que esa

goría? Por qué de ser así,

nta de Sophie me trae d

enorme signo de interrogac

o… ¿Cuál fue

e caer sobre ella con gracia, para después cruzar sus largas pie

el aparato entre sus manos —. Me pidió que te pregunte si hay algún

os restándole impo

mientras cada quie

labios. Sé que hay algo que qu

oncertada mientras me

núa d

sisto y el

—enfatiza la primera

e encontrar una razón lógic

qué h

pira una

oy segura que Josh pregunta más por él que por tí… ¿Acaso no recue

aquel día vie

shb

nas los Rams anotaron el touchdown que

así. Me apartó de inmediato y lo sujetó del jersey, con mirada furibunda. Tod

así —gruñó Joan con

sto perder el con

¿Qué hac

haciéndome pegar un brinco —¡Quier

el fl

e reunión en el que estuviera incluido mi novio. Mis celebraciones de cumplea

e que supiera qu

seriedad —. Hay un límite entre lo sano y lo enferm

eramental, pero de eso a que sea celópata, hay mucha distancia de por medio. Pero no quier

arece en el momento indicado, con un pequeño muffin de chocolate decorado con bastante crema chantilly de co

ero agradezco el que con su pertinente aparició

lauden y me instan a pedir un deseo antes de apagar la vela. Y solo hay una

vida si es

ndo un pacto conmigo misma. Un propósito se fija en mi men

mis compañeros se han acercado a felicitarme y llenarme de buenos deseos y pequeños detalles. Justo ahora mi escritorio se encuentra hec

rto aparece en mi pecho, producto de

go (Mis favoritas) y un pequeño perro de peluche que tenía bordado en el pecho la frase “Para el amor de mi

mirarlo, el tuyo ya estaría reducido a ceni

mente. Aunque claro, como suele suceder, mi expresión no termina de ponerse del todo de acu

. Sin duda sabe

ía de mi cumpleaños y el que este año esté

illoso día (Nótese el sarcasmo), es el sonido de u

ph con ironía al tiem

lares y comenzar a teclear, seguramente un m

rde”

acones, el sonido que producen aquellos pasos es insoportable. Estoy optando por seguir el ejemplo de Mark, así que me pon

, her

ro profundamente, dándom

o con una son

ento en el área de RR. HH

cierto al verme reclinada en mi escritori

mino de levantarme y acomodo mi sueter dentro de la cinturilla de falda.

las pa

da un repaso de pies a

entusiasmo, aunque yo sé que todo es pur

me deja sin aire, cosa que agradezco pues así no te

ama cerca de mi oído y ca

s típicas imitaciones de ella y yo estoy haciend

manera incómoda, s

ones de cabello cobrizo detrás de su oreja. Un silencio desagradable se ex

ie

ago para q

a recoger mis cosas. Tomo las tarjetas de cumpleaños y estoy por g

dulce y fastidioso perfume, de golpe. Resisto mis ganas de taparme la nariz. El aroma es tan penetrante que

entender realmente

da sorpresa. Hay algo en esos ojos verdes que nunca ha terminado de agradarme y

mi cerebro tarda en maquinar una respuesta inteli

su escritorio —interviene Soph, ganándose la aten

do corazón, que este día sea inolvidable para tí, Emi —Guiña

de su computadora. Solo consigo verle los ojos pero estos están

sto —Se queja Soph

atar al capital humano. Para prueba basta el hecho de que el número de personal masculino sea mayor al personal femenino desde qu

nosas de esa mujer y el mal sabor

Mejor larguémonos

i amiga se ilu

que este día… ¡Nena, cumples veinticuatro! —Celeb

iene un ambiente agradable, la música no es tan estruendosa como el club al que Soph pretendía que fuéramos, lo cual te permite tener

na, pero Sophie piensa que es mejor idea hacerlo en el suyo, ya que está más cerca del lugar en donde nos vamos a reunir con los

otra, al ver a Soph su rostro se ilumina y sonríe como si fuera la cosa más bella que hubiera visto jamás. Ella se acerca, lo sostiene de la mejilla y le da un casto beso en los la

lación así, en cuánto me gustaría volver al inicio de mi noviazgo con Joan, cuando era el hombre más

eañera! —La voz de Josh me d

sivo abrazo, que hace que despegue los pies del piso. Chillo de la impresión antes de c

sde el día que nos cono

Lo reprende mi amiga —. Además, tengo que dejarla des

lia. —Bromea Josh, ganándose una mi

e acerca a Sophie, aprision

ie

fundidos en aquel beso antes de que Jo

Sophie me toma de la mano y me arrast

gura —. Te juro que a Joan se le va

*

/

s! Gracias por l

l inicio del drama

Obtenga su bonus en la App

Abrir