Lazos de sangre en nuestra oscuridad
a
ones, pero para mí eran rojo y amarillos combinados, dando un naranja oscuro. Quizás era el nivel de alcohol y algo más que habíamos tenido en aquel club, ni lo conocía. Solo fui con mi mejor amiga, Alana
dre la noticia de que también me gané un regalo. Cuando el médico dijo que estaba embarazada, el mundo se volvió negr
tada y desilusionada con la vida, todo dejó de importarme. No veía cómo podía ser capaz de criar a alguien si ni siquiera sabía cómo combinar la ropa. Otro punto
ar aquí para ti siempre. Pero ahora ya no estás sola, has pasado a segundo plano, eso -señala a mi vientre-, es ahora lo primero. Vas a terminar la escuela y luego veremos cómo hacemos para que sigas adelante. Sé que estás asustad
ue cuento para todo. Y por supuesto que tenía razón en que ahora mi vida no era mía, era de esta semillita que estaba creciendo en mi interior. Daría todo por este bebé y nada ni nadie iba a hacerle
a que su ahijado debía comer bien. Y si alguien se atrevía a decir algo se llevaba unas buenas ofensas de mi amiga, la cual tenía una lengua bien afilada. Lo
trabajaban tanto que casi siempre la dejaban sola, así que en casa era una hija más. Éramos tan unidas que hasta iba conmigo a las consultas y le preguntaba de todo al doctor. Este también disfruta de que fuese t
nacimiento del bebé que por suerte llegó en las vacaciones. Fue el día más duro de mi vida, aunque mi madre me hizo ir a clases para embarazadas para
gando a ser naranja oscuro algunas veces y esto me recordaba a su padre sin lugar a duda. De hecho, era lo único que recordaba con claridad de aquella noche. No tenía ni la mínima idea d
e ayudó, de hecho, lleno mi cuarto de regalos para su ahijado e incluso dormía conmigo para ayudarme en las madrugadas con mi hijo. Cuando se marchó, la vida se me hizo más difícil como madre, pues a los tres mese
, así como en fechas festivas. Fue ella quien me embullo para que tomara clases en línea para que mejorara mi futuro, le hice caso y escogí un curso de al
era muy despierto, eso sí, no así en la parte de relacionarse con otros. Prefería jugar solo en el parque, apartado, que u
sa fue que consiguió un mejor trabajo. Al final acepté, pues viviré cerca de la universidad de mi amiga y estoy feliz de q
s aventajado y se aburre al jugar con niños de su edad, ya que él juega a un nivel algo superior, solo algún que otro compañero se relaciona con él. Estoy impresionada con eso, así que busco ayud