LA HIJA DEL EMBAJADOR
DE
juni
parte de la población mundial, dado que los test realizados han demostrado una eficiencia del 90%. La Comunidad Europea y otros poderosos estados comenzarán una dura batalla por hacerse con las primeras dosis disponibl
grave nada más comenzar la reunión—, me parece increíbl
tancia propinó latigazos fríos con la mirada en dirección a los cuatro agentes especiales que aguantaban con estoicismo su
e prácticamente en el laboratorio. La comida basura y los refrescos azucarados son sus únicos pecados.
es insatisfecho con los avances de la investigación. El tiempo apremiaba
s se supo de ella —respondió Elena, la única agente mujer presente en la estancia—. Y antes de que
stándose las gafas de vista sobre el puente de su nariz recta—,
nfiltraría, sin embargo son muy cuidadosos en este aspecto, también. Las personas que trabajan para ellos lo lleva
l especialista en resolver casos imposibles. ¿Qué convencería a este cabrón a entrar en razón? Miles de personas mueren cada día, el mundo no puede permitirse el lujo de
la atención puesta en su dispositivo móvil a
odamos hacer para convencer al señor Keller a liberar
y en la enorme pantalla digital apareció
. Propongo secuestrarla y devolverla al padre a cambio de ceder la fórmula de la dichosa vacuna. No me apasiona proponer soluc
de voces se exten
atizada si le ocurre un hecho así. En segundo lugar, tendrá guardaespaldas y protección, y todos los dispositivos de autodefens
álido de Axel destellaron co
chica en menos de…—consultó su reloj—, veinti
os de la sa
nido al gesto tenso de su rostro le hacían parec
dicó Albert, chascand
yectó en la pantalla digital varias fotografías de jóvenes de distintas nacionalidades—, ya sabéis
bjetivo —a
—recal
en la vida. El dinero y a sus hijos. El dinero para multiplicarlo y los hijos para continuar aumentando sus riquezas. Er
s del hotel estarán plagados de agentes privados y potentes dispositivos de seguridad como drones, cá
os de su plan dejando a su
oniendo una mano en el brazo de su pupilo. Le pareció increíble que el huérfano de apenas cinco años que rescató dos décadas