icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon
Traicionada por el Don: Su Huida Definitiva

Traicionada por el Don: Su Huida Definitiva

Autor: Gavin
icon

Capítulo 1 

Palabras:1086    |    Actualizado en: 15/12/2025

lete en su jugo, la laptop encriptada de mi e

el más poderoso de Monterrey, nunca cometía error

en mil pedazos: "¿La idiota ya se

u amante

el de terciopelo rojo que ella había ad

era una farsa, un engaño elaborado. Yo solo era una

r, tenía que s

a, dándome el pastel contami

liana -ronroneó-.

ría, obligándome a no vomitar ha

ción no te

stra acta de mat

ones de pesos, y luego me abandonó para que yo enfrentara la deu

o su familia me golpeaba por

uando lo escuché planear nu

rnes -le dijo a Carlota-. Parecerá

levaba un cord

llevaba días con

aña y él fue a preparar

s por el acantilado p

eta negra de extracción q

creyó que había

de que acababa

ítu

Juliana

El aroma a romero y ajo perfumaba el aire de una vida perfecta, cuando l

que desmantelaría mi existencia: "¿La idio

debería haber e

del cártel más violento de M

res por una mi

guas por una

fatal, había dejado una grieta en su armadu

edé h

erza que la madera se clavó en mi palma

top, atraída por un

ulaba "El Show de Come

Alejandro, sus principale

piración se atoró en una gargant

erdad se compró ese vestido horrible para esta no

guro de que puede agu

Igual que cuando estoy en la cama con ell

olvió el

samente bajo mis pies, la cocina gi

é a segui

stel. Le puse un regalito especial en l

sta la última migaja si yo se lo dig

llar? ¿La Estrell

ta. Tú eres la Reina. Juliana es solo la esposa de

ando que se marcaran a

anta

lviera con él después de nuestra separación. Las flores, las promesas susurrada

a una m

un j

próximo Jefe, lo que requería una esposa "respetable

era el

emente el en

llo

ra la gente que toda

y dura instalarse en el centro de m

supervivencia que Alejandro creía ha

ad, asegurándome de que el

te, sacando un celular desechable que había escondi

mero de la A

errorizado entre las esposa

alida -susurré

tó una voz metáli

rio -

Pl

is ojos fijos en el calendario-.

principal sonó, señaland

deslicé la caja en el estante justo cua

ndro

un traje de Zegna: alto, con hombros an

su sonrisa era cálida. Era la sonr

z cargada de falso afecto mientras me of

b

en sus labios, am

o, Alejandro -dij

ed, donde yo había rodeado u

eñalando la fecha a setent

orpres

z esa noche, no

Obtenga su bonus en la App

Abrir