La Segunda Oportunidad de la Mate Rechazada
ra
mo una infección que se incuba en silencio
o con arrogancia en el pomo de la puerta de mi estudio. Luego, unos *sti
itorio, impregnando cada rincón de mi existencia con su
jetaba. Su silencio era
tu oficina en el cuarto del b
ma había cultivado, secado y mezclado. La luz del sol bañaba su rostro, otorgándole
se transformó en un cam
cabecera; Nadia, radiante, a su derecha. Y yo... yo había sido relegada
ha comentado que cocinas sorprendenteme
través del enlace, chirriante como un
anté la vista. Mantuve los ojos fijos en el informe financiero que hab
a-, ¿recuerdas nuestra primera transformación? La luna estaba tan hermosa esa n
r estaba marchita, drenada tras años de cederle mi
idad? ¿Quizás un destello de culpa? Me escrutaba como si intentara encontrar
ostro permaneció inmuta
e mi habitación se abrió con vio
ón contenida. Se acercó a mí con zancadas pesadas y, antes de que mi cerebro pudiera p
así? -gruñó, y su aliento calie
ante su cercanía, enviando oleadas de calor líquido directo a mi vientre. Mi piel, e
ré, intentando poner di
ar de un Alpha. Él bajó la cabeza, buscando mis labios con desesp
náuseas violentas asc
fora. Fue una r
las frente al inodoro y vomité hasta que no quedó nada más que bilis amarga. Mi cuerpo
r a mis espaldas, recu
sonaba ronca, te
stás? ¡El bebé se m
que casi resonó fuera del *Mind-Link*,
oró, reemplazada por el mandato del deber. Se alisó la camisa con mo
ad, y salió de la habitación
sas frías del baño, abrazándome a
l colchón una carpeta oculta. Contenía los correos impresos intercambiados con el Sr. López
presencia, y mi cora
e pie en el umbral de la puerta abierta. Sus ojo
y peligroso. Si él hablaba, m
ndo el estatismo. Dio un paso ad
rado y solemne-, aquí está el inventario de activos que..
teligencia. Y una silenciosa complicidad. Él había visto mi plan,
e aire. Tomé el documento con dedos firmes-
!* -La voz de Nadia volvió a irrumpi
uosa y se marchó, cerrando la puer
ficación oficial de la Manada, un documen
a permanente, tracé una línea
me e inquebrantable, escri
Oliver. Lo sabía en lo profundo de mis entrañas. Había una vida formándose dentro de mí,
más. Tenía que
ágrimas. Solo tenían el