icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Mi matrimonio forzado con un caballero en coma

Capítulo 10 

Palabras:1029    |    Actualizado en: 15/12/2025

vista de

rillante y dorado, entraba a raudales por las ventanas cuando finalmente me desperté. Miré el ornamentado reloj d

ión protestando, y corrí al baño. Después de una ducha rápida, me puse una simple bata de seda, con el pelo

eriódico de la mañana, bebiendo té. Lilia, la joven prima, estaba absorta en un ju

Kayson, levantó la vista, su sonrisa cálida-. No hay nece

, pero te guardamos un poco -agregó

levantó d

ste bien? ¡Les dije q

sa fácil, era abrumadora. Sent

dé dormida. L

hizo un gesto desp

n pequeño y elegante comedor-. Todos los demás, ¿quizás podrían encontrar a

io. La señora Caballero se sentó frente a mí mi

s a ir al médico para revisar tus lesi

o se revol

una mujer de rostro amable que habl

n sanando maravillosamente, la fractura del brazo se está curando y no hay

ivio escapó tanto de la se

finalmente tocando mis labios. Mi cuerpo se e

onductor que se dirigiera a una extensa y serena i

explicó, su voz suave-. Ha hecho un progreso inc

e con el que me casaba. El hombre en coma que había imaginado. Me preparé, imaginando una figura frágil e

mayordomo, nos rec

tranquilizadora-. Ha estado esperando mucho este momento. Ha estado despierto y mayormente consciente desde hace

golpe. ¿Despierto?

y soleado pasillo hasta una espaciosa habita

su voz llena de afecto

una silla de ruedas, de espaldas a nosotros, sus hombros anchos, su cabello oscuro brill

a. Se me cortó

contraron con los míos. Eran inteligentes, observadores y extrañamente familiares. No l

voz un murmullo ba

expectativa que había construido cuidadosamente, se hizo añicos en un millón de

recorrer mi cuerpo. La señora Caballero, sintiendo mi sh

ora Garza. Eleonora, e

a. Dudé una fracción de segundo,

r rozando mis nudillos-. Es bueno

bíamos conocido antes? ¿Y por qué me miraba

aplaudió, un brill

podemos fijar una fecha! ¿Qué tal dentro de dos semanas? Tie

n de desafío, una tranquila resolución, se instaló dentro de mí. Esta era mi escapatoria. Mi nuev

sa lenta y genuina q

suena perfe

fusión que una vez podría haber compadecido, s

onces, al ver sus rostros, que supe que mi partida no era solo p

Obtenga su bonus en la App

Abrir