icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Él los eligió, y lo perdí todo

Capítulo 4 

Palabras:1131    |    Actualizado en: 14/11/2025

ista de El

mi corazón se hubiera partido físicamente. Fue una agonía abrasador

a foto, mi teléfono vibró de nu

un v

ente filmada en secreto. Mostraba a Damián sentado en un sofá, mi sof

de Mateo se escuchó. "

tó la res

samente dulce. "Eres muy bueno y me compras juguetes

des y suplicantes. "¿Por fa

de cámara, con un falso tono de re

a mano y alborotó el cabello del niño. "No

ó en una de ternura, una mirada que n

que sea tu papá?",

intió con

bien, entonces", dijo, su voz clara y fi

legría de Mateo. Un segundo después,

e una familia. Quiere un hijo. Algo q

z. La malicia triunfante en su tono era a

ano en mi brazo. Había venido en cuanto la lla

círselo. Dile que estás embarazada. Es

dado durante seis semanas, una pequeña chispa de esperanza que había planeado co

omo moneda de cambio para recuperar a un hombre que me h

sistema al que no le importaba. No traería un hijo a un mundo de conflic

jo, Jime", susurré, las palabras

l hospital. Estaba allí para mi primera cita prenatal, mi corazón una mez

ólogo, aferrando la foto granulada del u

to al puesto de enfermera

ué. Me vio y sus ojos se abrieron de par en par. Instin

vacilante. "¿Qué haces

departamento de ginecología visible. Su ceño

ente Mateo, agarrándose el estómago y dob

o. Miró mi rostro pálido,

ndo", dijo, su voz tensa. Se agachó

r al hijo de otra mujer por encima de mí. La escena era tan grotescame

ena retumbó por el pasillo. Me había estado esper

cara de furia. "¿No tienes ni idea, verdad? ¡

"¡Está embarazada, idiota! ¡Ese

stro conmocionado de Damián, Mateo reaccionó. El niño, instruido

gruñido que era aterrador en un niño tan pequeño. "¡Ere

ápido. Mateo, con toda la fuerza que su pequeño cuerpo pud

liente y absoluto. Mis piernas cedieron y me desplomé en

, una garra viciosa de

Mateo, pateándome el costa

os. "Mira a esa mujer, peleándose con un niño".

ro una mezcla de conmoción e indecisión. Simplemente... estaba mirando. Esperando a que yo cedi

r, una ola de mareo

lido y húmedo extend

voz apenas un susurro

más fuerte esta vez. "¡Papá, me duel

agonía. Me miró, tirada y sangrando

su de

te. "Necesitas controlarte. Mira lo

sus brazos, dá

encima del hombro, y luego se alejó, dejándome allí en el s

-

Obtenga su bonus en la App

Abrir