Su Venganza, Su Amor Eterno
cación formal de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. Mi li
retirado de la puerta. Miré mis cuadernos, llenos de años de investigación, análisis y estrategias. Eran
peraba. Eran inversionistas, personas que
defraudadora!
una mujer, con el rostr
se estrelló en mi abrigo. Otro lanzó una lata de refresco arrugada que me golpeó e
o el espectáculo. Estaba apoyado en su coche, con un aspecto completamente sere
por encima del rugido de la m
onsable del Colapso del Mercado". El artículo detallaba mi "confesión" y me pintaba como una operadora d
tercambio silencioso y abrasador. No vi culpa en sus ojos, n
ta del coche para Julián, y se
y caí de rodillas en la acera sucia. A través del bosque de piernas
n miró a Damián co
Debe estar t
siquiera
to es lo que pasa cua
Él creía que yo no era nada sin él. Que mi posición en la vida estaba determ
a. Los gritos de enojo de la multitud llovían sobre mí como golpes
una lesión grave. "Mi brillante Alana no puede lastimarse", había arrullado, besando mi dedo. Una vez había prometid
ás, ahora me odiaba más. O peo
tud, quizás pensando que finalmente me había vuelto loca, comenzó a retroceder. Los guardia
uda? -preguntó uno de e
eza. No necesitaba su ayuda. N
ón. Fui directamente al hospital. Recogí todas l
arla a una camioneta de transporte que espera
El plan si
ojos abriéndose lenta
je, una promesa de un futur
rarse, el coche de Damián frenó bruscamente detrás de nosotr
A dónde cr