Su Venganza, Su Amor Eterno
bían aniquilado los ahorros de toda la vida de mi familia. Lue
mundo, me obligó a firmar una confesión falsa, amenazando c
regodeó, revelando la verdadera cara de Damián: yo solo era un "instrumento útil",
nza compartida... todo era una mentira. Me quedé sin nada,
ora me arrojaba al fuego? Me quedaba una opción: sucumbir a la desesperaci
ítu
n Ponce, mi mejor amigo desde que éramos niños, había liquidado los ahorros d
mi jefe, el hombre que me había rogado que me uniera a su firma. Ahora, era el arquitecto de mi destrucción. Había
pequeña mesa. Una confes
la. Hacía girar despreocupadamente una tarjeta de plástico entre su
a junto a nosotros. El siseo rítmico de la máquina de ox
tarjeta-, tu madre pierde su cobertura. Esta
an. Sentía los la
verdad dejarías morir a mi
uel sonrisa asom
e confié mi empresa, el futuro de m
o de ella se contrajo con un jadeo desesperado por aire. Damián pa
oz un latido suave y
renta y uno... c
os eran tan diferentes. Yo era una analista financiera que había escalado a base de puro trab
a dos años, en mi primer día, me
que era una fe sincera en mí-, me aseguraré de que tengas
o antes de que yo diera un discurso principal en un importante evento de la industria. Me quedé parada en
ad. Solo espera a que l
sta que los conserjes empezaron a apagar las luces por la noche. Nunca
n trato en el que había trabajado durante un año. Entonces, una llamada de un J
los clientes furiosos. Más tarde, lo vi en el vestíbulo, vendando tiernamente
me, defenderme. Ahora él er
, trazando un camino cal
dio,
mancha negra en mi futuro. Lancé el documento sobre la mesa y corrí al lado
el, con movimientos p
oda emoción-. Sé que todavía valoras mi confianza. No te pr
vo en l
iete días. Esta vez, me aseguraré de q
f
a habitación estéril. ¿Crédito
a pantalla. Llamé a Felipe Huerta, el médi
ue la condición de mamá podría tratarse mejor en el