La Curandera Sin Poder
aroma a copal y tierra húmeda, ese que me acompañaba
je de las hierbas y mis cant
desmoronó. Una energía oscura me arrebató mi p
capital, me abandonó sin miramientos: "N
e se había comprometido con Sofía, mi hermana adoptiva,
r a polvo del Mictlán me golpeó, y al pasar el espasmo
una simple vend
: "Miren a la gran curandera," decían, "aho
ano, el cacique del pueblo vecino, se apareció y m
a del cacique de un pueblo próspero,
o matrimonio, descubrí la verdad q
, revelando su cruel plan: me había usado como un escudo humano
nueva vida... todo había sido orquesta
techo, con una sonrisa triunfante, reveló que tanto mi ritual a
, algo dentro de mí se encendió. No era una petición, era una ord
sa fue un eng
nvertí en un fantasma, una verd
iseria y Sofía sufre su propio
es que nunca, y el tiempo