La Abogada Traicionada: Renace Fénix
s de champán chocando y las risas falsas. Yo, Sofía Ramos, su esposa y también abogada, estaba a su lado, sonriendo como se esperaba de mí. Para todos, éramos la p
jo Ricardo en su discurso, con el trofeo de
ndo el peso de su brazo en mi cintura. Era una actuación, y ambos éramos ex
en el balcón, escuché las voces de dos secretarias de la fi
uera la única mujer en el mundo
Dicen que la nueva pasante, Valeria, se la pasa más
tro? ¿La que parece
onamiento, y no iban a una junta, te lo aseguro. Pobre So
ontrar inconsistencias y buscar pruebas, empezó a trabajar a toda velocidad. Los viajes de negocios de última hora, la
isa pegada en la cara, pero por dentro
ado se fue, Ricardo se
íble, mi amor?
u olor, la mezcla de su loción cara y
, Ricardo. Fue
. Descansa. Te
año. Mientras él se desvestía, yo fingía buscar algo en mi bolso, pero en realidad mi corazón latía con una furia helada
a gritos ni escenas. No le daría esa satisfacción. Ricardo era un maestro de la manipulaci
truir a sus oponentes en la corte con una sonrisa encantadora. Pu
ir
ivorcios iba a recibi
uraría de qu
Necesitaba a alguien discreto, alguien que pudiera conseguirme lo que necesitaba sin levanta
"Necesito tus servicios. Máxima dis
e inmediato: "Entendido.
convirtiendo en la demandante. El juego hab