El Precio De Vuestra Ignorancia
ndose sobre mí. Podía sentir su mirada furiosa en mi nuca. Después de un largo momento
A veces, las cosas pueden salir terriblemente mal. Un pequ
crisparon sobre el lápiz que sostenía, y sentí la punta de mis uñas clavándose en la palma de
ir. Había tocado la herida más
la beca. Estaba nerviosa, repasando mi presentación por última vez en la bibliotec
ho. "Mi receta especial. Te ayud
cuerpo pesado. Durante la audición, mis manos temblaban incontrolablemente. No podía enhebrar la aguja de la máquina de coser. Mis palabras s
lado, celebrando. Solo meses después, cuando ya estaba hundida en la miseria, até los
ición me llenaba de una furia helada. Me giré lentam
je, mi voz desprovista de emoción.
acción de segundo. No espera
estúpidos. Su plan en la vida anterior había funcionado porque yo era ingenua y confiada. Pero ahora, renacidos y con conocimiento del futuro, su
la vuelta y contonearse hacia su asiento junto a C
ca. Iba a destruirlos. Iba a exponerlos por lo que eran y
sente. Empezó a faltar a las clases de la tarde para tomar trabajos de medio tiempo mal pagados. Lo vi una vez, a través de la ventana de una cafetería, limpiando mesas con una expr
ógica era retorcida: si actuaba como el hombre exitoso que fue, entonces el éxito simplemente se materializa
das ausencias injustificadas. La oficina del director lo llamó varias veces. Empezó a juntarse con un grupo de chicos mayores, conocidos por meters
a, me lo encontré. Estaba con su nuevo grupo de amigos, bl
con un tono burlón y arrastrado. "La señorita perfecta, siem
ron, una risa hue
en que su uniforme escolar estaba arrugado y manchado
la biblioteca. Su risa me siguió por el pasillo, pero no me afectó. Era el sonido d