La elegida del millonario
un momento para reunir fuerzas, pero el panorama fuera no era menos desgarrador. Las camas llenas de pacientes graves, las miradas ansiosas de
s. Intrigada y con el corazón latiendo rápido, caminó hacia el origen del alboroto. Desde la entrada de urgencias, observó cómo llevaban tres camillas con personas gravemente heridas. Los
no sabían aún lo que había pasado. Cerró los ojos un momento, tratando de contener las lágrimas. La imagen de su hija, f
ersación cerca de la recepción. Dos enfermeras hablaban en voz
una de ellas-. Parece que fue u
rajeron? -pre
e ellos. Está muy grave, casi no le dan
onocía. Eran una de las familias más influyentes de la ciudad. Si su hija
as. Se sintió invadida por una mezcla de tristeza y ansiedad. Era un recordatorio cruel de lo frágil que era la vida. Aun así, se obligó a
Tom, el médico de confianza de la familia, entró en la habitación. Su rostro irrad
isa amplia-. ¡Hemos encontrado un coraz
jando escapar un sollozo de alivio mientras daba gracias al cielo entre murmullos. Mia, por su part
rimas. Era una noticia que había esperado escuchar du
zaron mientras Mary r
, gracias
uda creció en el pecho de Mia. Ella sabía cómo funcionaban las li
el octavo puesto en la lista. ¿Cómo pasé al primero tan rápido? Por lo que
se desvaneciera. Adoptó una expresión s
yente que intervino para asegurarse de que recibieras el corazón. C
mente llenándose de preg
esa persona
tilmente co
No puedo darles
e dio po
nante? ¿Q
gar, su tono má
artir esa informaci
ente inquietud de su hija,
do lo que hemos pasado, por fin tendrás la oportunidad de vivi
no podía ignorar que algo era extraño. No era fácil aceptar que alguien a quien no conocía h
ue todo estaba listo y que el equipo médico estaba preparado. A
. Haz todo lo posible para e
ensar en las incógnitas que rodeaban esta situación. ¿Quién era su misterioso benefactor? ¿Y por qué habían toma
ría, pero Mia sabía que, más allá de la operación, l