EL RESPLANDOR DEL ÁMBAR
ba
de Laura. Me ofreció más de lo que hubiera imaginado, no solo en términos materiales, sino algo muc
la idea de que alguien como él esté dispuesto a ayudarme de esa manera todavía me sorprende. Sin embargo, mientras me acerco a la puerta del departamento,
ndo algo rápido para cenar. Me mira con una sonrisa, per
n esa curiosidad tranq
rado. Su familia tiene una fundación, y quiere que la use para ayudarme a continuar con mis
egundo, con los ojos
arlo? -me pregunta mientras termina de cortar unas verduras, s
miedo. No quiero depender de nadie otra vez... ya sabes cómo termi
do los cuchillos a un lado. Su exp
ar. Parece que él realmente quiere ayudarte, y no hay nada de mal
aura siempre sabe qué decir para calmarme, para ha
n no estoy acostumbrada a la idea de que algu
omando mi mano
r. Y tú te lo mereces. Has pasado por mucho, y ah
puedo seguir cerrándome a las oportunidades por miedo a lo que podría salir mal. Tengo que pensar en mí, y en el be
esta a intentarlo. Su respuesta llega casi de inmediato: **"Me alegra escuchar
iento que estoy empezando a tomar control de mi vida,
-
undación está diseñada para ayudar a mujeres jóvenes que están en situaciones difíciles como la mía. Me ofrece la posibilidad d
ara tus estudios, -me dice con ese tono calmado que
ecido dar el siguiente paso. Tal vez, después de todo, ace
a el nombre de la empresa de Maximilian. Me han ofrecido un trabajo en el departamento de administración, algo se
cillo, bien remunerado, y además, discreto. No tenía que sentirme expuesta ni vulnerada. Al entrar, una recepcionista
es que puedo hacerlo desde casa algunos días, lo que me permite seguir atendiendo las citas médicas del embarazo y prepararme para el
s cosas en tan poco tiempo. Aún no sé qué me depara el futuro, pero una cosa es segura: no estoy sola. Maximilia
estra protag
adelante, ahora más que nunca po
elación entre Ámbar y Maximilian, algo me
onor para mi que les guste. Recuerda que estoy e