La obsesión del mafioso alemán

ítu

ina

a Adler sobre mí, sus embestidas son tan bestiales y dol

mienza a hacerme daño, sus estocadas son tan precisas y coordinadas, muerde el

salvajismo, tengo que fingir que me gusta, que lo amo cuando no es así, h

ifica las embestidas, gimo exageradamente para

a dentro de mí, me rodea con sus br

pleaños me

osa

que no es el hombre perverso con quien me he casado, ese ser déspota y arroga

He pensado por tanto tiempo que estoy maldita y muerta en vida. Mi teléfono suena mostrándo

s. Viviré toda mi vida odiando a mi padre, Maximiliano Beckett, el hombre

me abraza aferrándose a mi cuerpo, mi padre se muest

s maravilloso que ha podido obtener, se

su vida, el mafioso me extiende una mano para que vaya hacia él, papá me anima para que lo haga. Mi cuerpo tiembla, miro a mi padre buscand

madre Anastasia por conveniencia, siempre pensé que él me protegería de todos los peligros d

lia Beckett con el mafioso, pero jamás quise prestarle

ombea con fuerza, Adler me sienta e

mi padre me ha sacrificado para salv

mi padre, el cual solo hace una mueca

lda, me muevo incomoda cuando mis glúteos si

lado para no ver este acto tan repulsivo, esto es mucho para ambas, trato d

uera? ¿O sí? -siento la bilis subir por mi gargan

algún día esta p

evó. Lloré por tantos días su muerte, pero mi odio hacia Max se intensificó

ntígüelas y traidores. Todos quieren un poco de ti; durante todo mi tiem

cometer actos ilícitos, al principio solo se ocupada de llevar y traer en su coche al jefe del cartel de Bramen, luego se ganó la confianza de todos

e logré fui la golpiza más horrible de mi vida

me dejaban. Adler odia que le lleve la contraria, que no responda a tiempo, que no le sig

labras, tod

anto tiempo, esa es otra hipócrita de lo peor, sabe que su hermano me retiene

mientras me abraza, hago una

aci

o un día entero junta

me paralizo asustada. Adler no ha dado el permiso para mi s

buscando al alemá

os color avellana son iguales a los de su hermano mayor, a difer

e lo arrebata de las manos, me subo a la cami

r Schulz sale

, la gente nos mira de arriba abajo y no era para más

ada de esto, Adler es un maniático del control, tengo una habitación repleta de vestidos de

la observo traer un par de vestidos para mí, hemo

s de Adler Schulz, las personas me llaman afortunada por tener el amor del mafioso más poderoso del continente, yo no lo llamaría así. Papá me reprocha porque según

, abro la puerta encont

afiosos, asesinos y putas» está aquí para celebrar mi cumpleaños número vein

te de todos, me extiende una caja y trato de hacer una cara de e

r-. Adler me be

can para felicitarme, la mentira y la falsedad está

me despegan ni un momento, todas las personas quieren

r esto, tengo que comportarme o su sesión de sumisió

tri, el mejor amigo de Adler me saluda.

te quiero cerca de ellos» «

rme firme para no quebrarme. Camino hacia el patio t

a esta manada de idiotas que solo me trat

vigilan el ala sur me miran con determinación; saben que he intent

nauseabundo sentir como se hunde en mí, como me besa y