Sentimientos y Dinero

ra natal y su familia. Pero necesitaba ayudar a sus padres y haría cual

vendedora en una zapatería y su carrera de Historia, cerrada a inicio

iendo su gran mano, uno de sus dedo

le la misma cálida sonrisa. No sabí

ueno dejar que su madre se encargar

randes de la región, que era criado

Artur, y una niña de 7 años, Amanda

ares y también cuidarlos, como u

o de cuidados. Vio a Joel levantar l

ón de autobuses. - ¿Vamos? Vanda les dijo a los cocineros que prepara

e tenerte cerca. Manuela se sintió m

a quien no veía desde que tenía 15

ía propuesto comprarle el mejor ves

. Había alquilado un salón de fest

al fnal de la celebración, confesó

o ni paciencia para ser madre, pero

no está celosa. - se rió, refriénd

emplando cómo el sol se ponía sobr

un viento cálido que sacudía los p

acera, residencias de mampostería s

su alrededor, todo era nuevo y d

deslumbrada por el tamaño del cam

uciente. Abrió la puerta del pasajero trasero y colocó la maleta en el as

tierra hace calor, pero la semana pas

s verano en el Sur", comentó con l

ta del pasajero para que ella pudier

emperaturas superiores a los cuaren

romeó. Manuela sonrió, considerand

a preocuparse por el tiempo que pas

na vocecita interior repetía las p

o naciste en el siglo XIX". Se puso

alió del estacionamiento. El camión l

o tráfco. A lo largo del camino, l

entrelazaban como en un abrazo.

able y apenas se podía oír el rugi

seis horas en autobús, comiendo e

r las piernas. Su única compañía e

o nunca de Marguerite Duras. El aut

etirle las mismas palabras ahora, m

a fnca Leonardi, su nuevo hogar, o m

un acto inútil para cualquiera que

odo lo que podía hacer era contro

ta abajo sin saber quién, sin pode

ado por la corriente de la vida, por

ta para que ella se fuera. Se mordió

a con la majestuosa construcción, en

enda de dos pisos. Su tía le había

en una arquitectura en forma de U a

. Los muros pintados en terracota cub

delimitada por nueve arcos que pre

camente instalados, que le daban un tono nostálgico e íntimo al ambiente. No parecía la casa principal

os edifcios antiguos. Quizás la man

exicana de los años 1920. Tía Vanda

El pelo rizado y rojo oscuro, la pi

ue no se veían y ella