Tú... Mi Ángel.
s se lo habían dicho, los grandes esfuerzos traen grandes recompensas, estudio hasta casi quemar sus ojos, siempre esforzándose por ser la mejor en todo, y lo consiguió, esta hermosa latina de piel br
claros, y fue por eso mismo que pronto descubrió que levantaba suspiros y odio por igual, no llevaba ni dos semanas en aquel lugar, pero le pesaba como una eternidad, nadie quería realmente su amistad, algunos la buscaban en plan de conquist
en dos cuevas oscuras, como toda tú s
no le temía, quiso seguir su camino, pero el joven estaba ardido por su respuesta, en un arrebato la tomo de la trenza que ella llevaba colgada a un lado,
unda de otro joven se dejó oír, mientras ella trataba de no l
brir y cerrar de ojos, parecía una maquina destinada a golpear, alguien creado para hacer daño
a nunca fue partidaria de la violencia, venia de un país violento donde la corrupción y el narcotráfico al igual que los asaltos s
la latina. - dijo el joven que también era rubio,
r los golpes que había dado, su rostro blanco crema no tenía daño alguno, pero sus manos eran otra cosa y lo supo porque el joven, como si la con
o mientras lo miraba con
dió con una sonrisa de lado y a e
s del joven estaban lastimados y de ellos brotaba
alterado, o al menos advertirle como era el joven, pero estaba d
ndo el joven le respondió en su lengua natal, solo p
en ella que hablaba hasta por los codos, o eso le decían sus padres. - Hemos llegado morena hermosa. - Macar
pañero y ella de estúpida no lo sabía, aunque no lo creía, lo hub
pidió el joven dejando un beso en su corinill
Macarena no sabía era que la observaban por quien la había acompañado al salón. No presto atención a la clase, quería hacerlo, debía hacerlo, pero no pudo, se mald
, ya no se molestaba como los primeros días en tratar de hacer amigo, al fin y al cabo, no los necesitaba, ella estaba allí era solo
o al mismo tiempo que ella se ponía rígida y giraba de forma lenta, solo para descubrir
orque no lo recuerdo. - dijo llegand
rieron de sobre manera, que la llamara morena, latina, era normal, Macarena, acep
y nuevamente paso su brazo sobre los pequeño
i nombre es Stefano...- antes que ter
oven se giró y ar
ra al rector y Macarena creía que e
el hombre se dio media vu
día morena, creo que es
de la cafetería, mientras veía esa
acias por rescatarme. - le dijo la morena con una sonrisa y el j
ría, incluso en el campus, el mismo que trataba de no pisar para no ser molestada, p
y su grupo de idiotas detuvieron su caminar, Macarena se maldijo in
Damián, pero al haber sido agredida por un joven solo tres días atrás, ya nada le
¡todo esto es territorio de los NEIZAN! - y a
alivio, dándole una
donde estaba el grupo de Damián. - Idiota, recuerda que Neizan manda aquí, no la vuelvas a tocar, ni a molestar. - los ojos de Stef
del rostro de la joven. - Y mi nombre es Stefano, con S y O. - Macarena se iba a disculpar, pero Stefano no le dio tiempo, ya
a en la envidia de todas las mujeres, por haber atrapado al más bello príncipe, sin saber que Stefano estaba ganando una apuesta, ese fue el motivo por el que nunca corrigió el error del rector, quien aque
as cuatro mitades con las que compartía todo, ahora estaba a la deriva, prestándose a un juego o mejor dicho una apuesta que si sus padres supieran, estaba seguro lo desheredarían, además de que su hermana mayor Zafiro, esposa de Neizan, lo golpearía hasta el cansancio, estaba seguro de ello. No pensaba molestar a la latina más de la cuenta, solo sería un coqueteo inofensivo, pero rápidamente se d
agitada cuando libero los carnosos labios de Macaren
ía, Stefano siempre se mostró como una persona autorita
ueres de amor por mi mor
r órdenes de nadie, pero al fin acepto, grande fue su sorpresa cuando al llegar a la universidad al día siguiente no lo encontró, creyó que estaba enfermo, por lo que lo llamo,
andonaro
o. - trato de amenazarlo, pero la verdad era
ijo el ruso con cierto desdén en su voz, como si ella
er honesta no
engañar. - Maca dejo de caminar y giro sobre sus ta
il de
ar mucho dinero, eras la novatada del año, una apuestas. - termino diciend
estarme. - dijo tratando de no caer
le a Maciel cuanto gano S
él quien llamaba, y ahora que era ella quien lo necesitaba contactar, Stefano había desaparecido, como si nunca hubiera existido, pensaba dejar todo all
staba con otros dos que eran com
s dejaban de usar la máscara amistosa que ponían cuando esta
u novia? - dijo tratando de sonar indife
más lo hizo por diversión él no necesita
cara fue a ella, camino de regreso a su departamento, mientras se regañaba mental mente por ser tan estúpida, t
o la esperaba en la puerta de su departamento como si nada
que la joven dijo antes de mos
S DE
eor, sus padres habían muerto en un desafortunado accidente, ya no estaban y ahora debía asumir la responsabilidad de cuidar a su hermano menor, ¿Qué podría hacer con 19 años y sin estudios universitarios? No solo eso, ahora su hermano de 12 años era su responsabilidad, sentía que
jos celestes como el cielo mism
a de mostrarse segura y tranquila, sus lá
desconocido, ajustando su agarr
e esa manera en frente de un desconocido, pero es que ahora su vida sería
jos marrones en el hombre, no pudo evitar ver lo guapo
o con pena, el hombre le dedico una son
rmanas, dos rondan tu edad, me gustaría que si
cupe por ti. - respondió con un nudo en la
estar sola. - el hombre tomo s
Macarena trataba de tranquilizarse y lo estaba consiguiendo, o
desconocido. - la morena pensó que ese apellido le ib
decirte que tus primas, casi herma
uso más problemas de los que r
color chocolate le decía que la muerte era el causante de su dolor y es que este hombre conocía bi
omo todo caballero le ofreció llevarla a su destino, alegand
starte más de lo q
vamente a estados unidos y de allí a China, Macarena estaba tan afectada por todo lo que le sucedía que ni siquiera reparo en que Hades no llevaba su
, ya que por la insistencia de él en que Macarena tomara un café, había perdido la posibilidad de despedirse de sus padres, sin pensarlo la acompaño al cementerio, bajo la mirada de algunos conoc
hablaste a tus padres? - la curiosidad estaba bien camufla
incomoda, no sería bien visto que d
sabe que el estrés le afecta a bebé? - los ojos de Macarena se pusieron rojos un
ace una semana. - y para ese mome
sperdicias tu vida siendo madre soltera. - la diversión se dejó oír al final y po
ando a la puerta y dando un paso e
o se quedaría para ver si los rumores eran ciertos, Hades la observo mientras la joven ap
mamá te cuidara. - Hades jamás había visto a una mujer tan des
tomó por sorpresa y se giró de inmediato. - El
muerte tenía ganas de preguntar quién era y donde se encontraba, estaba disp
partir de ese día su vid