Durante gran parte de tu vida, te preguntas muchas veces ¿Cuándo conoceré al amor de mi vida? ¿Cómo será ese hombre que me quitará el sueño? ¿Lo podré reconocer cuando aparezca o lo dejare pasar por no darme cuenta?
Sueñas muchas veces con un encuentro mágico de esos que ves en las películas de Hollywood, pero la realidad es que la vida no es como las películas. No vas caminando un día por la calle, te tropiezas con un desconocido, le vuelcas una taza de café y él clava su mirada en ti mientras que de fondo suena una de esas canciones que te llevan a suspirar como una tonta. La realidad es que ese desconocido probablemente te diga que eres una idiota por no fijarte por donde caminas y te recrimine por haberle manchado su camisa favorita, y por más que tú trates de disculparte, él no entenderá que fue simplemente un accidente. Asique inmediatamente descartas esa posibilidad y te sigues preguntando como y cuando conocerás a esa persona por la que cometerás muchas locuras.
Seguí los consejos de mis amigas, fui a bares, discotecas, me abrí un perfil en tinder, y lo único que conseguí fue encontrarme con algún que otro psicópata que quería llevarme a su cama a la primera cita, no es que tenga algo en contra de eso, pero al menos hubieran preguntado mi nombre antes de hacerme esa propuesta ¿no?