Ese príncipe es una chica: La compañera esclava cautiva del malvado rey
Mi esposo millonario: Felices para siempre
El arrepentimiento de mi exesposo
Novia del Señor Millonario
Extraño, cásate con mi mamá
No me dejes, mi pareja
El réquiem de un corazón roto
El dulce premio del caudillo
Renacida: me casé con el enemigo de mi ex-marido
Diamante disfrazado: Ahora mírame brillar
Estoy en la sala de interrogatorios desde hace unas horas por qué la policía otra vez me agarró usando drogas ilícitas, algo que necesito hacer para sobrevivir.
No he visto a nadie desde que entré aquí, así que solamente estoy sentado observando el vaso de agua que tengo en la mesa en este lugar.
A veces nada más me quiero escapar y ver qué puedo comer con el poco dinero que tengo en los bolsillos.
Cansado de esperar, sin embargo, tengo que mantener la calma para tener el mejor humor posible cuando vengan los oficiales, así que en silencio voy contando los segundos.
A la media hora después viene una chica rubia, alta, buen cuerpo y vestida como si trabajará en la oficina junto con unas carpetas en sus manos.
Ella se sienta a mi lado para empezar a abrir las carpetas al frente mío para darme cuenta de que tiene mis expedientes como si toda esa información la pudiera utilizar en mi contra.
Así me imagino que están pasando las cosas mientras un grupo de policías observa toda la acción a través de un falso espejo.
Jamás en mi vida ha existido la mujer que me ponga en mi lugar, así que me quedé en silencio esperando a ver que me tenía que decir.
—Entonces, ¿Te llamas Sebastián Blair? ¿Si quieres te paso una carpeta?—escuchó que me dice mientras la demostró mejor.
Ver e interpretar el rostro a las personas es algo que se ha dado bien, es un talento natural que tengo.
Por algo he sido alguien que ha tenido buenas ventas de drogas a pesar de que empezó hace unas semanas, pero la policía siempre se entromete.
Para mí, mala suerte no he podido extorsionar a estos oficiales.
—Si tiene toda la información para qué me pregunta ¿Acaso no sabe que mi familia está muerta? Así que vaya al grano y pregúntame lo que quiere saber—le preguntó directamente mientras la mujer se levanta y me quita las esposas para qué me quedé más tranquilo.
¡Cómo si de alguna manera necesito que haga eso!
—Quiero saber acerca de tu pasado. Sabes eres muy inteligente, tienes muchas cualidades físicas para perderte en ese mundo—justo en ese momento le quiero responder, pero me quedó callado—Para tu información, no tengo todo el día para esperarte.
Esto lo pienso muy bien por qué este es un juego que no pienso perder, así que me quedó llamado y enseguida me doy cuenta de que esa información no está en mi carpeta, por lo tanto, entiendo para que ha venido.
—Si me das lo que te pido, no te voy a meter en la cárcel, como resultado, te voy a dejar en libertad, pero tienes una advertencia, si te encontramos otra vez ganando o participando en la mafia, vas a ir a la Cárcel por muchos años. Ahora lo que estoy haciendo por ti es darte una oportunidad.
Estoy en contra de la espada y pared, no lo quiero hacer, pero la verdad si necesito estar libre, así que voy a fingir darle algunos detalles falsos, por qué se nota que no es nada tonta, pero tampoco demasiado inteligente.
Así que comienzo a hablar.
—Mi papá comenzó en el negocio de la mafia desde hace mucho tiempo, por qué si fuera por los impuestos del gobierno nunca nos hubiéramos comprado nuestras cosas. Todo iba bien en sus negocios hasta que empezó a gastar y gastar más dinero más allá de la cuenta. Mi mamá se preocupó mucho por la seguridad de nosotros junto con mi hermana. Así que necesitaron irnos de Chicago para volver aquí en California para empezar de nueva una vida sana, sin embargo, descubrieron unos cobardes e incendiaron la casa para escapar, luego diciendo que el trabajo estaba listo—le respondo, pero no espero que me crea o no.
—Luego de eso, no tenía tiempo para llorar ni nada por qué apenas tenía 16 años y lo único que quería era vengarme de todo eso.