Mi Leal Guardaespaldas

Yo me llamo lía Bell, vivo en New Jersey, mi familia es una de las mas influyentes, mi padre William Bell es un empresario importante y mi madre Emma Bell es una actriz famosa y yo Lía una estudiante universitaria.

Hoy estoy en mi habitación leyendo un libro sobre cultura el mundo sentada en el balcón, cuando alguien abre la puerta, una voz femenina suave y gentil me dice "Lía tu padre te esta buscando, el esta en su estudio baja a verlo". "Buenos días madre, ahora iré a ver a mi padre" dije para guardar mi libro y ponerme de pie, camine me detuve la puerta "Madre iras a ver a la señora Días". "Cariño sabes que ella es mi Mánager y hoy tengo unas entrevistas... por que el interés". "Solo preguntada". Salí de mi habitación y me dirigí a el estudio de mi padre, cuando llegue toque la puerta y escuche la voz al otro lado que me dada permiso y después abrí la puerta, mi padre estaba sentado en la silla enorme junto a la mesa y al lado contrario de donde estada el se encontraban dos sillas en una de ellas estada un joven apuesto, alto, tez blanca, ojos de color azules, cabello castaño, delgado y musculoso. Mi padre me hizo una seña de que me sentara y así lo hice "Hija mía sabes que tu eres lo mas preciado que tengo y por eso tengo que protegerte a toda costa así que te contrate un guardaespaldas".

"Padre no necesito un guardaespaldas yo puedo cuidarme sola".

"Lía es una orden tendrás un guardaespaldas y prométeme que te llevaras bien con el y no le harás lo mismo que a los demás, por favor has un esfuerzo por mi y tranquilidad mental". Se que mi padre solo se preocupa por mi pero me acaba de chantajear y claro a veces es mejor darle por su lado "Esta bien pero recuerda que solo lo hago por ti" un destello salió de los ojos el hombre frente a mi y dijo "Joven Dereck Brown te presento a mi hija de hoy en adelante tu serás como su sombra... no tengo nada que mas decir pueden retirarse". Inmediatamente salí del estudio y detrás de mi, salió mi nuevo guardaespaldas.

"Señorita Bell un gusto en conocerla" aun no voltee a verlo, su voz se escuchaba alegre y luminosa. "No puedo decir lo mismo" no dije nada mas y fui a mi habitación a terminar de acomodar mis cosas necesarias para la escuela y por el resto el día no volví a ver a Dereck Brown ya que no salí de mi habitación.