Login to ManoBook
icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon
La libertad

La libertad

Robert

4.7
calificaciones
1.8K
Vistas
2
Capítulo

Sandra da una mujer que trabaja para ganarse la vida, su novio Dan es un hombre orgulloso, Para Sandra es el hombre perfecto, pero... un nuevo amor llega a su vida y hace que cambie de perspectiva, ella se enamora y juntos luchan por un amor en libertad

Capítulo 1 Sombaras del día

Sandra se levantaba una mañana, su rutina era la misma de siempre, ella era una chica dulce y amable, tenía un novio, Dan Fu, para ella Dan era lo máximo.

Sandra trabajaba para la empresa Deleeite, una empresa influyente en Londres, era una gran empresa, Sandra tenía la dicha de trabajar para la empresa, esta empresa era muy reconocida por los productos de calidad

Dan había llegado a recogerla a su casa para llevarla al trabajo, en todo el camino Dan no hizo más que hablar de sí mismo, de lo grandiosos que eran sus amigos; Sandra ya estaba acostumbrada y por lo tanto no le importaba escucharlo

La amiga de Sandra, Lara, le decía que Dan no valía la pena, pero sin embargo nunca le hacía caso, muchas personas decían que Dan no merecía a unahica como Sandra, ella no prestaba atención a cosas así

Pero ese día todo cambio... al llegar a la empresa Sandra como de costumbre tomaba su taza de café; "¿señorita Lang?" preguntó el cartero, "si, soy yo" respondió Sandra con voz suave y hermosa, "esto es para usted"

Cuando Sandra estaba en su escritorio abrió el sobre y se quedó plasmada de lo que vio, eran varías fotos de su novio con otras chicas; al ver esto Sandra entro en un trance

Lo que Sandra pensaba era que ese día sería grandioso, pero sin embrago el día se tornó de sombras oscuras, quería llorar pero en el trabajo no podía; pidió permiso para ese día con la excusa de que no se sentía bien, llego a casa devastada y comenzó a llorar.

Le hablo a Dan y le dijo que terminaban, que ella estaba muy dolida por lo que había pasado; en la mente de Sandra no paraba la duda de quien había mandado esas fotos, ¿sería Lidia la que investigó todo esto...?

Sandra tenía tantas dudas

La mañana siguiente tuvo que asistir al empleo, pues no podía darse el lujo de no ir ya que necesitaba dinero, ella era una chica humilde y lo que ganaba apenas le alcanzaba para mantenerse

~ Por su parte Dan no se molestó en llamarla y pensó que Sandra lo llamaría de nuevo para rogarle que regresara con ella, sin embargo esto no pasó

Pasaron los días y Sandra estaba devastada y más porque Dan nunca se molestó en llamarla, ella estaba dispuesta a escucharlo y tal ves a perdonarlo, pero el nunca llamó

Lara siempre había estado para Sandra y no era de extrañarse que se había quedado el mayo tiempo posible para consolar a su amiga

"Tu... tu me enviaste las fotos?" Dijo Sandra sollozando

"No Sandra, no se quien podría ser, pero por mi parte no me gustaría hacerte sufrir y no me habría gustado verte así" dijo Lara con cierta sinceridad

~ Dan se había pasado la semana con sus amogs divirtiéndose, hasta que el nombre de Sandra le cruzó por la mente, de pronto se acordó de lo hermosa que era (ahora) su ex novia, Sandra siempre había sido hermosa, preocupada por el y ahora nadie lo hacía, en ese instante sintió un miedo que lo invadió por completo

Lara estaba consolando a Sandra para que se sintiera mejor, cuando una llamada los interrumpe, en la pantalla decía *Dan

Sandra respondió entre sollozos y le pregunto qué quería, "Por favor Sandra hagamos las pases, te extraño mucho" dijo Dan

"Me has lastimado muy fuerte Dan, no se si podría... tendrías que demostrar que realmente no lo volverás a hacer" dijo Sandra aún sollozando

Dan le prometió que nunca volvería a pasar y que a la única mujer que él amaba era a ella; Lara por su parte no estaba de acuerdo, pero comiera su mejor amiga y quería la felicidad de esta, no tuvo más remedio que darle una sonrisa de aprobación forzada

Sandra estaba algo más contenta, el día de trabajo la semana siguiente fueron maravillosos para ella y ya no había esa sombra que la invadía por completo

Dan invito a Sandra a una cena, la cena era debido a la reconciliación, Dan le repetía una y mil veces que en parte fue la culpa de Sandra, ya que si no hubiera tomado nada enserio nada de esto hubiera pasado

Sandra se sentía culpable y le pidió perdón por su mal comportamiento; como de cosntimbre Dan comenzó a hablar de sus innumerables aventuras con sus amigos, y... en ningún momento le pregunto a Sandra como se sentía ella

Sin embargo Sandra estaba muy feliz; muchas personas le habían dicho que no valía la pena darle una segunda oportunidad a Dan, ella nunca prestaba antencion y simplemente decía "tal ves ustedes piensen así, pero para mi el lo vale todo"

Sandra salía del trabajo cuando un compañero de trapajo se le acercó y le comenzó a hablar, este era el compañero de trabajo de Sandra; Dan acababa de llegar y al ver que su novia hablaba con un muchacho no pudo evitar ponerse celoso de el, su ira no se pudo controlar y cuando llego a Sandra dijo "no puedo creerlo, me estás engañando con este estupido michacho!?"

Sandra estaba asustada, "es solo un compañero de trabajo, Dan, cálmate" dijo Sandra con la voz nerviosa y avergonzada

Su compañero de trabajo se alejó para que no hubiera mayor problema

Dan estaba en una discusión con Sandra y este solo estaba escuchando y repitiendo "ya se, lo siento, se que es mi culpa por vestirme así, pero amorteprometo que no volverá a pasar"

Dan no se calmaba, y justo cuando estaba a punto de jalarla con fuerza y llevársela un hombre alto y realmente apuesto, más que Dan, pensó Sandra

"¿¡Usted sabía que a una dama no se le trata así!?" Dijo el hombre con seriedad y con una voz serena

"¡no se meta en mis asuntos, ella es mía y por lo tanto puedo decirlo lo que yo quiera!" Respondió Dan muy enojado

Para que las cosa no se complicarán, Sandra los detuvo, la mirada de los dos jóvenes se posaron en ella, "por favor dejen de pelearse, señor lamento lo sucedido y Dan es mejor que nos vayamos" dijo Sandra con voz temblorosa pero nunca perdiendo lo dulce de su voz

El hombre apuesto había desaparecidoa, Sandra ya no pudo ver a donde había ido, en cuanto a Dan estaba furioso y metió a Sandra en el auto, la llevó a casa y le advirtió nuevamente que ella era de el y de nadie más

Sandra asintió y se despidió con un beso ligero y rápido

Seguir leyendo

Quizás también le guste

Capítulo
Leer ahora
Descargar libro