No Juzga Por Su Portada

No Juzga Por Su Portada

Gavin

5.0
calificaciones
97
Vistas
24
Capítulo

Llegué a la Ciudad de México con el corazón lleno de ilusión. Después de meses chateando en línea, por fin iba a conocer a Ricardo, mi novio, que para mí era un príncipe de la capital, y yo, Sofía, una simple chica de pueblo. Pero al salir del baño en la cafetería, escuché su voz. Una voz llena de burla y desprecio. "La morra es de un pinche pueblo pesquero, ¿te imaginas? Seguro llega oliendo a pescado", dijo Ricardo a sus amigos, riéndose. Sentí un frío que me recorrió la espalda al escuchar cómo me describía como "pobre e ingenua" y que quería "despacharme como un paquete no deseado". La humillación me quemaba por dentro, pero una voz inesperada lo defendió, una voz que no conocía. "No mames, Ricardo. Eso está muy manchado. La chaval cruzó medio país para verte". En ese instante, mi corazón, antes latiendo de emoción, se convirtió en una piedra de furia fría y decidida. Iba a ir a esa cita, pero no para lo que él esperaba. Iba a ir para que no supieran lo que les esperaba.

Introducción

Llegué a la Ciudad de México con el corazón lleno de ilusión.

Después de meses chateando en línea, por fin iba a conocer a Ricardo, mi novio, que para mí era un príncipe de la capital, y yo, Sofía, una simple chica de pueblo.

Pero al salir del baño en la cafetería, escuché su voz. Una voz llena de burla y desprecio.

"La morra es de un pinche pueblo pesquero, ¿te imaginas? Seguro llega oliendo a pescado", dijo Ricardo a sus amigos, riéndose.

Sentí un frío que me recorrió la espalda al escuchar cómo me describía como "pobre e ingenua" y que quería "despacharme como un paquete no deseado".

La humillación me quemaba por dentro, pero una voz inesperada lo defendió, una voz que no conocía.

"No mames, Ricardo. Eso está muy manchado. La chaval cruzó medio país para verte".

En ese instante, mi corazón, antes latiendo de emoción, se convirtió en una piedra de furia fría y decidida.

Iba a ir a esa cita, pero no para lo que él esperaba.

Iba a ir para que no supieran lo que les esperaba.

Seguir leyendo

Otros libros de Gavin

Ver más
Cariño, Te di 7 Oportunidades

Cariño, Te di 7 Oportunidades

Cuentos

5.0

Mi esposo, Mateo Vargas, me ha pedido el divorcio siete veces. Cada vez, la misma excusa: "Valentina ha regresado a México y la necesito" . Y cada vez, yo, Sofía Romero, su "esposa" que él desechaba como un pañuelo usado, firmaba los papeles. Siete humillaciones públicas, siete rondas de susurros a mis espaldas, siete colecciones de actas de divorcio que ya parecían cromos. Sacrifiqué mi carrera como diseñadora, mis sueños, mi dignidad, todo por ser la esposa perfecta que él nunca valoró. Pero esta octava vez, mientras él me sonreía perezosamente y prometía regresar en tres meses para volver a casarse, algo cambió dentro de mí. ¿Cómo pude ser tan ciega? ¿Tan desesperada por una migaja de su amor que no veía la toxicidad? La risa que solté fue amarga, sin alegría, como la historia de mi vida con él. "No te preocupes", le dije, mi voz con un filo helado que nunca antes había usado. "Esta vez, haré las cosas diferente yo también." No hubo lágrimas, no hubo gritos, solo una calma aterradora que lo descolocó por completo. "Cuando vuelvas, ya no estaré." Se que se siente aliviado, pensando que no habrá drama esta vez. Pero lo que no sabe es que esta vez, el juego ha cambiado. Porque en mi mente, un plan completamente diferente ya estaba en marcha, uno que no incluía ninguna boda, ninguna reconciliación. Uno que no lo incluía a él. Y esta vez, Sofía Romero no solo se irá, se levantará, se transformará. La venganza es un plato que se sirve frío, y yo sé esperar.

Quizás también le guste

Capítulo
Leer ahora
Descargar libro