presentara. Entonces me contrataron para trabajar en su empresa de consultoría financiera y estaba feliz de trabajar en una empresa mediana, propiedad de un destacado profesor académico, muy solicitado en el mercado financiero. Empecé desde abajo. Lo intenté muy duro. Para estudiar de noche y sacar las mejores notas. Trabajar durante el día y poder ascender a puestos más importantes, con mejores salarios. Pasé todos los años de mi carrera estudiando y trabajando. Ni siquiera tenía tiempo para fiestas, lo único que me hacía quitarme el foco eran las mujeres.