Más allá de la cruel obsesión del multimillonario
vista de
e posó en mí, y sus palabras
to es obra tu
, desco
s el que está aco
asco-. No podías soportar verme feliz, así que enviaste a tu amigo aquí -
falsa, tan profundamente insultante, q
brando mi alta del hospital, un hospital en el que estu
ver que Alonso no se había apresurado inmediatamente
ponerte de su lado
oso de la
nso hacia mí se desvaneció, reempl
! -gritó, corr
boca. Alcanzó a Ciro en el pasillo
ar, su voz una caricia baja y tranqu
. Ciro se quedó allí, con los brazos cruzados, su r
¡Y el juguetito de tu ex-esposo intentó
os fijos en Javier. El frío y despi
fendió" a Ciro. Rómpanle las manos. Es arquitect
e invadió. Esto no era u
tras los guardaespaldas comenzaban a avanzar-
ida -advirtió Alonso, su v
mi corazón latiendo
Construcción Martínez. Si le pones un de
paldas soltó una ri
ia Martínez es un mosquito comparada con el señor Taylor. Pod
lpa. Mi conexión con Alonso, este vórtice tóxico y destructivo, había arra
oderó de mí. Solo había una moneda que
e posaron en un pesado atizador de met
ccionar, lo agarré. Mis amigos j
¿qué está
ardaespaldas, mi voz
tas, ¿verdad? ¿P
izador y lo descargué con todas mis fu
ía al rojo vivo. Grité, cayendo de rodillas, el atizador cayendo al suelo. Mi muñeca est
corriendo a mi lado, su r
daespaldas, a Alonso, cuyo rostro era por primera vez ileg
strozada-. Una mano está rota. Estamos
nso. Después de un largo y tenso momento, Alonso asintió apenas p
ron hacia mí, sus
co? ¡Tenemos que lle
r y frustración finalmente corriendo por mi
me de pie, una conmoción estalló desde el balcón del s
Se había subido a la barandil
él que por mí! -chilló, su voz histérica-. ¡Si
lonso estaba b
Es peligroso! ¡Haré cu
omét
or favor, baja! -rogó Alonso, su v
, dio un paso triunfante hacia
prendido mientras caía hac
dió en cá
congelado de horror al pie de las escaler
tiempo d
ó todo el impacto. Mi cabeza se echó hacia atrás y golpeó el suelo de mármol. Mi
scaleras a toda prisa. Ni siquiera miró mi forma arrugada y rota en el suelo. Sus ojos solo estaban puestos en el hombre que
iro, ¿estás bien? P
a me