No Juzgues La Portada 2

meses

a buscar Beleza.

e vendré con Sara e

se para acá.

alguna de ellas. Son lo más cercano a unas amigas q

Isabel, por

desayunando dando e

accidentalmente en mis e

antos, pero no quiero que cai

con f

la llamada de Rámses. Anoche nos acostamos muy tarde y no quise despertarlo en la mañana para darle los buenos días, como ac

eocuparme seri

nso bostezo mientras se restregaba los

ti también mi am

to. Hoy compraré un selfstick, man

a y Gabriel, Isaack y Dono

te trio me llevaba h

expliqué mientras ellos se reían y

ojos—, no me di cuenta que iba

or una base o trípode, así tendrás

un POV porno de mal presupuesto con los movimientos que

ería

venir—. No harán esto, no op

Estamos dando ay

ea—intervino Rámses—, e

. Límites, lí

re las manos y ello

ón, despué

ames después, es que no debe

ancés con una sinc

hici

on terror como Rámses había preguntado en el grupo familiar

n chistes sobre el uso que le daría y Rámses solo confirmó,

a vez en la que iba del mes. Lo hacía como medio de protesta para los temas que no debían

comprarlo por mí—me explicó pero igual yo seguía avergonzada, además su e

ensé que no lo lograría hasta que h

fácil

que próximamente sería el cumpleaños de Gabriel y él no pod

Isaack y los hombres d

o podía negarlo. Ext

gonzosos para mí y el francés había dejado de reírse tanto como el resto de los chicos—. Nos darán la clase y luego

así significaba que no podríamos hablar sino hasta

do los de Rámses que llevaban una carga de horas pr

pueda—me recordó, qui

ocupes. Ya estoy lleg

ue tengas un buen día bombón. Te amo y lamento

stallar en risas y mis mejill

e le dije que lo amaba

upada por la economía de Hayden y no por el interé

me bajé del auto antes de que

e vacaciones, solo asistíamos los que íbamos a los cursos de verano, los que buscaban nivelarse con alguna mater

s corriendo?, e

sin él mirándome podía seguir un poco molesta, el

gués. Dime que estará hoy

enes prohibido

sito conocer a esta tal Marypaz, arruinó todo para todas. ¿De

ituación como la de Marypaz, y ya que Gabriel era mi familia, podía tirarse

ros y me encantaba, porque exigía que fuese organizada con todos los asientos contables, detallistas con cada gasto, ingreso, egreso…

lí a la casa cuando Sara gritó y clavó sus uñas en mi brazo. Busqué la razón y me encontré con Gabriel recostado de

abrazo y

dije que te ve

ue iría en metr

Pensaste que tenías

gregó Sara mientras se acercaba a saludarlo. Acarici

—saludó m

a Ga

, como siempre Isabel lo evitó y subió al auto. ¿

*

s O’P

ntrarme en las anotaciones de mi libreta, y ya he releído m

a práctica. Me faltan horas de sueño, horas de descanso, horas de todo. Me volví adicto al caf

nos demandantes porque no tendré que hacer práctica los mismos días que vea clases. A esa

uiero compartir mi día con ella, debo conformarme con verla por una pantalla y a veces ni eso,

e no creo que hubiese podido estar separado de Amelia por tanto tiempo,

vez suena m

ste dormido. V

e la posibilidad de dormir ahora, mañana tenía

or un poco de agua y ya que estaba allí me hu

rto hasta tarde si mañana no pod

eña encimera de la cocina, sus

on gran facilidad, porque descubrí que era su personalidad, una mu

lo est

y opté por algunos melocotones en almíbar que me quedaron

te de la lata, con sincero placer. Compartía siempre algunos conmigo y guardábamos el secreto

tro secreto a voces, hasta que solo fue m

starte—me

ercié regresando a la mesa donde

quieras. ¿Te

ue?—me preguntó Susana

aste, me ha funcionado muchísimo estudiar en la madrugada. Creo

rcajada y cuando se reco

llas para estudiar. Son nuevas y son oxigenantes ce

o levantarme del sofá donde permanecía rec

olso al piso—. Odio esas cosas, lo sabes. ¿Por qué

pero su actitud con

tresado con los estudios. Fra

ia que esperaba haberla roto. No podía creer que ella me hubiese hecho

iota defin

usqué por internet y varias páginas aparecieron. Era una droga bastante común entre los estud

dependencia por culpa de su i

ás maduro y consciente, no busco ocultar mi dolor ni nada de esas mierdas que me pasaban por la cabeza cuando probé la primera v

a y por esa razón me levanté más temprano y me marché incluso antes

versidad de Boston pero insistió en hacer el curso para poder destacarse más en las clases, tenía una beca que no pod

ersidad y una vez allí, mientras llegaba

briel apareció en la pantall

n ¿y

el desayuno. Por lo menos ya sé

, necesitaba habl

cía un poco más despi

…—y entonces le conté todo lo de Susana, cuando t

sto que ent

tomar de es

hablamos al respecto, nuestro miedo a pasar por ese mismo dolor indescri

sto que no

a mentirle a él, a

de lo contrario no

Entonces escuché un

e orines mientras

orine, esté o no

taba pensando, lo vi caminar por el

un poco de celos, yo quería estar allá con ellos. Aquí ciertamente no estaba solo, Hayden siempre sacaba tiempo p

ho entre las distintas embajadas, con una agenda más apretada que nunca antes por algunos problemas internos del país que pusieron la

en resumi

cido, lo cual era muy raro en él—. Preocúpate por Susana porque como siga así Ha

ntió quedamente pero su ceño f

a sabe

e cuento esto… no quiero darle dolores de

sas para el desayuno. Dejó el teléfono en un sitio donde

tes de que despiertes a

rla?—una de sus cejas se alzó c

rtí y él se rio mientras rodaba

a Jurídica, tendremos la primera evaluación y no entendí nada en clases. Y

melia colapsará

las llamará de “amiguis”—rió y soltó

yo

se cuento de Susana, es como la v

o te escuche

taría

ses. Pasamos una hora entera estudiando, repasando los objetivos de la

pensar en lo que h

o es difícil y anoche fue especialmente rudo en la emergencia. Sin embargo sabrás

a presentarlo?—no era algo u

el hijo del Doctor Michia y francamente, nunca

tengo tiempo. Llega a las 7

estrech

del hospital, hoy por primera vez terminaría la práctica a la hora correspondiente, pero en ese momento

y apenas estoy llegando a la casa, sin haber po

ue me indicara que pasase, cuando n

eocuparme. No tenía nada de tiempo para poder estudiar y los nervios comenzaban a ganarme. Entonces,

ufrió mi papá y el mismo Gabriel con su propia dependencia. Quité la mano de las pastillas y c

veces el mismo párrafo sin que pudiese entender nada, mucho menos grabármelo. No había taza de café capaz de de

staba mantenerme despierto y en más de

valdrá todo este tiempo acá si no apruebo

la de Susana. Tome una tableta de las muchas pastillas que t